Quantcast
Channel: Un cigarrito y a la Cama
Viewing all 417 articles
Browse latest View live

Black Friday, Jalogüin… ¿Cuándo celebraremos Acción de Gracias?

$
0
0
En muchos posts tengo que empezar explicando el título. Aquí no creo que haga demasiada falta. Ya sabéis por dónde voy. ¿No nos estaremos pasando con tanta modernidad y globalización y nos estamos volviendo más americanos que una señora de Güisconsin (donde quiera que esté. Que no, no es el señor que dice bromas en la tele, ese es de otro estado)? 


El caso es que poco a poco estamos copiando, ojo, en el todo el mundo, lo que hacen los señores de los E. E. U. U. Y no es ni bueno, ni malo. Es así. Y yo venía a hablaros de los pros y los contras que tendría que al final nos nacionalicemos todos americanos. Yo os presento los datos y vosotros luego ya veis que queréis hacer.  Allá vamos.


Historia

¿Os imagináis que en vez de tener que estudiar toda la historia de España, llena de Reyes, Austrias, Borbones (todos quieren ser los campeones), Godos y todos los demás, os tuvierais que aprender los Presidentes? La historia es muy cortita. En el principio había indios, se los cargaron, ganaron los vaqueros y llegó Trump y ahora quiere que se vayan los que no nacieron allí…. Bueno, no todos, sólo algunos, los que a él no le gustan.


Lo malo es que nos olvidaríamos de nuestra historia… aunque eso ya está pasando… Nos apañaríamos con una peli de 2 horas, como Forrest Gump, que te explica toda la historia de Estados Unidos en dos patadas, y a todo correr. ¿Y sería Rey Donald Trump? ¿Donald King? (¡Qué lío de hamburguesas!) Donald I de España y luego de Estados Unidos… ¿O cómo sería el título?


Fucking idioma

¡Ameisin! Por fin hablaremos inglés. Porque mira que nos cuesta. Toda la vida aprendiendo el “uanchufri” y los colores, y hasta ahí. Y no tendremos que aprendernos la primera persona del pluscuamperfecto del verbo del subjuntivo. Presente, pasado y futuro, y poco más. ¡Que eso es de tantos tiempos verbales!


Y que haremos con todos los insultos en castellano. Que ellos dicen muy pocos tacos. Pocos tacos pero muy repetidos. ¿Qué pasa cuando te des un golpe?  Porque el fuck vale para todo, pero no te alivia lo mismo que un “hostiaputajodé”, así todo junto. Y ahora puedes insultar en gallego, catalán, o euskera. Eso nos lo van a quitar. Siempre podremos insultar en la intimidad.


Pavo… o pavo

No más dolores de cabeza pensando la cena de Nochevieja… Pavo, y de segundo, pavo relleno, y en Navidad, lo mismo, pero con arándanos. Será muy cómodo y crecerá el sector pavero. ¿Cordero o besugo? ¡Pavo! Y ya está


¿Qué pasa con los que no les guste el pavo o sean “verdívoros”? Pues la gente que coma verde se comerá el relleno, los arándanos y el puré de patata. A ver si vamos a tener que cambiar el menú porque a los señoritos no les guste comer pavo. Habrá que sacrificarse… como hizo el pobre bicho, ¿O vosotros creéis que a él le hace gracia que nos lo zampemos?


 ¿Barça, Real Madrid? Aquí se juega al fútbol de verdad

Se acabó el fútbol. Y eso no tengo claro si ponerlo en la parte buena o la mala. No más programas en los que hablan si Messi se ha tatuado la cara de Cristiano Ronaldo o si CR se ha teñido la barba pelirroja. Eso sí, habrá más variedad, baloncesto, rugby con hombreras, señores en pijama jugando con un palo o béisbol, hockey.


Habrá que adaptar un poco los deportes a España. No veo muy factible lo de poner campos de hockey sobre hielo en Sevilla. Igual podrían subir un poco el aire acondicionado en el Corte Inglés para que la gente entrene. Y que nos vayan explicando las reglas del béisbol, o del rugby… Ya lo estoy viendo, equipos y nombres nuevos, Los Madrid Merengators frente a los Culetors de Barcelona. Bilbao Lions versus Indians Atleticos. Y todos podrán tocar el balón con la mano, y con el pie, y agarrarse… todos menos tirar del pelo, que está muy feo, y además llevan casco. Aunque tendremos que acostumbrarnos a jugar con un balón diferente.


Las fiestas

Ya no habrá fiestas de guardar. O sí, pero se llamarán de otra manera. President Day, Martin Luther Day, Christmas Day, son poco originales para estas cosas allí. No tienen el Virgin of The Pillar Day, The Ascension of the Virgin,  o The Saint Week (lo que viene siendo la semana santa). Unos ateos rojos es lo que son. Quizá me he calentado un poco, rojos, lo que se dice rojos, no son… Y ateos, tampoco, lo que pasa es que tienen otras creencias, muchas, y algunas muy raras.


Como os iba diciendo, allí no son todos católicos apostólicos y romanos. Hay evangélicos, mormones (también quieren ser los campeones), protestantes, presbiterianos (que son los que no ven bien de cerca… ¿o eso es adventista?). El caso es que allí tienen un lío de mil demonios… Quizá no está bien mezclar los demonios con la religión… ¿o sí?


Soy ciudadano norteamericano, pago mis impuestos.

Siempre quise decir esta frase. Es lo que dicen en las películas para protestar de cualquier cosa. Que no quieres terminarte el cola-cao (por cierto, se acabará el Cola- Cao), lo dices. Que quieres cargarte a un señor de Iowa porque se ha colado en tu jardín, también lo dices. Ahora lo podremos decir todos.


Lo malo, es que algunos que no pagan impuestos, tendrán que hacerlo… A mí me han defraudado algunos jugadores de fútbol... bueno en realidad, nos han defraudado a todos...  Que no es que todos los americanos paguen, los que tienen mucha pasta tampoco les hace mucha gracia pagar. Eso no va a cambiar.

Ahora ya vosotros decidís, que todavía podéis. Luego no vengáis que yo no sabía, que si no me habían explicado. No hagáis como los americanos que votaron sin pensar… o los británicos que ahora se arrepienten por lo del Brexit…. O como noso…. Mejor no sigo, que ya tenéis bastantes ejemplos. Bye, bye… digo…. ¡Hasta la próxima semana!




Qué hicieron las muñecas después de ir al portal y otras cosas que nunca nos han contado

$
0
0
Todos recordamos que las muñecas de Famosa se dirigían al portal para hacer llegar al niño su cariño y su amistad. Que ahora desde la distancia, y para ser muñecas, eran muy repipis (¿hay palabra más repipi que esta?). Que aquí estamos para hacerte llegar cariño y amistad. No me imagino a nadie comenzando una conversación así, y menos con un niño recién nacido, pero todo es muy raro ese día… porque luego llegan unos señores con birras, e incienso y oro. Todo muy loco. 


El caso es que podéis decir que en los anuncios se permite todo, y tendréis razón. Que tú ves a una maciza anunciando un coche y te lo compras porque claro, en cuanto lo conduzcas tú, se te va a llenar el coche de señoras de buen ver. O porque un actor famoso tome café en inglés, (el actor es el que habla en inglés, el café vete a saber de dónde es) pues todos a comprar “Me Expreso” J.


Aquí vamos a intentar desvelar qué pasó con algunos de los protagonistas de los anuncios más famosos.

Las famosas muñecas

Nos quedamos en el portal de Belén ofreciendo cariño y amistad a Jesús en el pesebre (palabra que junto a próspero, sólo se utiliza en Navidad). Pero ¿Qué fue de ellas? ¿Qué pasó cuando se quedaron sin pilas? ¿Se perdieron en la mudanza? Y es que ya sabemos lo que pasa en las mudanzas. Que llegó mucha gente con regalos y puede que entre unas cosas y otras, pues se quedaron por allí en Belén, con los pastores, o los peces en el río, o con la burra que iba cargada de chocolate… El caso es que la última vez que se les vio iban con un niño que tocaba el tambor, ropopompón y que después de dar la turra por años y años, nunca más se supo de él. Ni las muñecas, ni el tamborilero volvieron a verse por el portal, en el que han puesto portero automático.


El que vuelve a casa por Navidad

El chico del Almendro volvía a casa todos los años por Navidad. Todos. Sin faltar uno sólo. La madre tan contenta porque volvía su retoño (seguimos con las palabras repipis). Pero no nos pusieron la reacción del padre ni del resto de hermanos. ¡Hasta los huevos estaban! El primer año bueno, pero los siguientes… Y es que el “almendro”, el que volvía por Navidad, se comía todo el turrón, el chorizo, el jamón… Bueno todo no, dejaba las peladillas. La madre tenía pasión por el hijo pródigo, y le dejaba hacer lo que quisiera, Tan mimado estaba que incluso le dejaba empezar el piso de debajo del surtido Cuétara, ¡Aunque no se hubiera terminado con lo de arriba! “Pobrecito mío”, decía la madre. ¡Que pasa muchas calamidades en el extranjero!”. Hasta que descubrieron que ni extranjero ni nada. ¡Que el chaval vive en Albacete! Ahora sigue volviendo a casa por Navidad, pero le tienen racionado el jamón, el chorizo, y no empieza la segunda planta del Surtido Cuétara, hasta que se termine el primer piso… y todas las peladillas.



El que sacaba la mano en el anuncio de BMW

Os acordáis del anuncio ¿verdad? A uno que le gusta conducir y le da por sacar la mano por la ventanilla del coche.


Todo iba bien hasta que llegó a la ciudad. Hasta ahora no se había cruzado con ningún otro coche, y el brazo estaba a salvo. Pero fue entrar por la M-30 y todo fue a peor. Le paraban cada dos por tres los señores policías. “Es que a mí me gusta conducir”, repetía una y otra vez. Y las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado (todos no, sólo algunos), le decían que bueno, que vale, que muy bien, que a todos nos gusta conducir pero que deje de hacer el idiota y las manos al volante. Ah, y que son 100 euros y 2 puntos. Además, tampoco ganaba para relojes, que cada vez que sacaba la mano se lo levantaba alguien. Algún accidente que otro con algunos ciclistas que no entendían la explicación de “es que a mí me gusta conducir”. Al final entre relojes, peleas con motoristas, ciclistas y multas, tuvo que vender el coche, y ahora está ahorrando para comprarse el abono transporte.

El negrito del África Tropical

Ya sabéis, el negrito que cultivando cantaba la canción del Cola Cao. Lo del desayuno y merienda ideal y eso del futbolista que metía goles, y el ciclista amo de la pista y esas mierdas. Que luego resultó que no era cosa del Cola Cao. Que les habían echado droja y que por eso ganaban.


Le tuvieron engañado mucho tiempo al negrito. Que por cierto para ser de África hablaba muy bien español, incluso hasta con cierto acento catalán cuando dice eso de “De a sus hijos Cola Cao si les quiere hacer dichosos, los niños con Cola Cao crecen más fuertes y hermosos”, como si fuera de Girona. El caso es que ahí estaba trabajando, cultivando y cantando hasta el día que se jubiló. Ahora vive tranquilo, en el África Tropical, pero sin cultivar, ni cantar, ni tomar Cola Cao. No lo probó en la vida, le daba un poco de asco esos polvos que no se deshacían en la leche, ni en el agua, ni aunque lo echaras al Mar Cantábrico un día de tormenta. Y es que él es más de café con carajillo y ahí le tienes con 90 años, y con una salud de hierro.

El dentista que no recomendaba el chicle sin azúcar

No tenía muchos amigos por aquel entonces. El típico que siempre llevaba la contraria a todo el mundo. Que todos los amigos querían ir a la playa, él  a la montaña. Que habían quedado para comer carne, él a comer pescado. Con todo igual. El día que preguntaron qué chicle recomendar, pues ya sabéis. Nada más que por joder… y también porque cuanta más gente tomara azúcar, más clientes tendría. Era “porculero” pero muy listo. Y así, el resto de dentistas que se las daban de guays por recomendar cosas sanas tuvieron que cerrar sus clínicas, él es ahora el dueño de “Vitaldien”,”Dientis”…


 ¿Encontró la señora a Jacq's?

¿Os acordáis de la señora que buscaba a Jacqs? ¿Le encontró? Pues no. Para qué os vamos a engañar. Y es que era chungo con los detalles que daba. Ya poniendo el nombre únicamente es difícil, pues si lo escribes mal, casi imposible. Y eso que ahora tenemos Google, que entonces la mujer iba por ahí preguntando. Montada en una moto y parando a todo el mundo para ver si habían visto al tal Jacqs. En cualquier caso. ¿Para qué lo buscaba? ¿Y por qué se bajaba la cremallera del vestido?  Por ahora no he podido encontrar la respuesta a sus intenciones. No sabemos qué querría hacer con el hombre la pizpireta mozuela. Nos lo podemos imaginar, pero tampoco vamos a aventurarnos ni hacer “supositorios” de lo que podría ser.

¿Volvió Curro del Caribe?

Seguro que os acordáis de Curro… El del Caribe, el que no era un páj… o ¿qué cojones era el Curro de la Expo? Hablamos del que se fue por 59,900 pesetas, 360 euros de los antiguos dólares (creo que me he liado)… El caso es que no volvió, allí se quedó… Realmente le detuvieron nada más llegar. Y es que no se puede viajar con unas gafas de buceo y unas aletas y pretender que te tomen en serio… y peor aún, sin pasaporte ni nada. Y diciendo que te llamas Curro. Me imagino a los de inmigración.. Pues por Curro no me viene nada. Y así le tienen, retenido en la entrada del aeropuerto del Caribe. Del mismo Caribe, ni provincia ni nada, en la capital.


Tenemos chica nueva en la oficina, se llama Farala y es divina

Sigue siendo la nueva de la oficina. Y es que después de ella no contrataron a nadie más en la oficina (tampoco vamos a dar más datos de qué era la oficina. ¿O es que antes había que dar más datos? Si eras oficinista, eras oficinista. -¿Dónde trabajas? - En una oficina, y se acababa la conversación). El caso es que ya no es tan divina. Se casó con un compañero de la oficina, que también es oficinista y tienen dos hijos que trabajan en otra oficina, distinta, pero que también son oficinistas.


Coca Cola es así. Pero así ¿Cómo?

Uno de los eslóganes de la conocida marca de refrescos (la mejor manera de decir Coca-Cola cuando no quieres decir la marca) era que Coca Cola es así.  Pero ¿Cómo? ¿Negra? (quizá esto es políticamente incorrecto). ¿O con azúcar? ¿Sin azúcar? ¿Sin cafeína? ¿Sin cocaína? ¿Sin trazas de frutos secos? ¿Singapur? Pues nada, que no lo dicen. Y luego que si quieren dar al mundo entero un mensaje de paz. Pues como no se expliquen mejor…


Soy Edu, Feliz Navidad

¿Cómo? ¿Que a ti no te llamó Edu para felicitarte la Navidad? Sería que no tenía tu teléfono… O peor aún, que te intentó llamar cuando le cortaron el teléfono a la familia, y el agua, y la luz, y el cuello a Edu… o casi. Y es que cuando llegó la factura, con la tontería de llamar a todo el mundo… Sí, sí, que decían que era gratis, pero ya sabéis la letra pequeña. No os podéis imaginar lo que pagaron los padres de Edu de teléfono aquel mes. Que todavía está el pobre chaval sin paga desde entonces. Le tienen embargado el sueldo de teleoperador. Un drama.


Las fiestas de Isabel Prel… Presl..Preyls…

Ya sabéis, la mujer de Julio Iglesias, y del Marques del “riñón”, y Miguel Boyer y pronto de Mario Vargas Llosa… todos señores con problemas económicos. El caso es que las fiestas debían ser lo peor. Si lo más recordado es que ponían “Ferreros Rocheres”… Eso sí, una pirámide chula… y los invitados todos gente con estudios. Seguro que yo hago la pirámide y siempre habría un amigo cabrón que coge una pelotilla de esas de las de abajo para joderlo todo… Y ahí es cuando empieza la fiesta. Todos a pisar los bombones. Por eso no hago fiestas… para que no me pisen lo “fregao”.


Pues ya sabéis algo más de la vida tras los anuncios. Nadie se había atrevido a contarlo hasta ahora. Como la vida del primo de Zumosol, que aún sigue en la puerta de los colegios defendiendo a los niños… lo que no sé es porque lleva una gabardina… O que ya se acabaron las Vacaciones Santillana. También desvelamos que las semanas fantásticas de El Corte Inglés duran más de 7 días y ya por último a lo que huelen las nubes…Pues a agua, ¿a qué van a oler?


Si sabes algún misterio de la “anunciación”, o lo que vienen siendo los anuncios, me cuentas y lo compartimos con el resto de la clase. 



Resumen resumido del peor año del último año

$
0
0
Sin ninguna duda este 2016 ha sido el peor de todos los que hemos vivido durante este año. Habrá gente a la que le haya ido bien, pero esos siempre son muy pocos y casi siempre les va bien. Y además, si quieren contarlo que se hagan su propio blog y que se lo cuenten a todos.


Todos los años, por estas fechas los medios de comunicación serios, y otros como la Razón y Un Cigarrito, suelen hacer un resumen resumidito de lo que ha pasado en 2016. Ya os advierto que tampoco va a ser algo basado en hechos… Vamos, como hace La Razón, con la diferencia que ellos no quieren hacer reír… Lo peor es que lo consiguen y además ganan dinero.


¿Vamos con el resumen?

Podría acabar muy rápido y decirte que no sabemos votar. En general, no me refiero a España únicamente. Es una cosa mundial. También que en este año se ha muerto gente que antes no se había muerto. Esto es aplicable a todos los años, pero como estamos hablando de 2016, me vale como prueba. Dicen que los años bisiestos no son muy buenos… Vamos a resumir, y para ello contamos con la ayuda de Google. A ver si tenemos suerte (chiste para los usuarios del buscador)

No sé si os lo he dicho alguna vez, pero tengo enchufe con Google. Yo empiezo a escribir la búsqueda y es como un cuñado, me sugiere cosas. Por ejemplo, comienzo a teclear la palabra “estoy” y mirad lo que hace el buscador. 


Eso sí, sin ningún criterio, lo mismo me dice que estoy enamorado, triste, o feliz. También hay posibilidades de que esté embarazada… cosas de la igualdad de género, o podría ser que me hubiera enamorado de 4 babys… Así del tirón, de cuatro, nada más y nada menos… Me comunican que no soy el único al que Google le sugiere cosas… Yo que creía que era especial…. Ahora sí que me siento triste…. Y un poco embarazado… lo de las cuatro babys, todavía no lo contemplo.



Para continuar con el resumen me voy a fiar con el resumen que ha hecho Google. Que si el Brexit, Pokémon Go, Trump, Juegos Olímpicos, iPhone 7, Prince, Leonard Cohen, David Bowie….

El Brexit

Llegó el primer Ministro de las Gran Bretañas e Inglaterra, y otras partes en las que llueve, que si querían quedarse en la Unión Europea. Y los ingleses que, a veces, son muy educados, contestaron. Lo que pasa es que dijeron que No, que “zenquiu” pero no. Que prefieren estar solos, que ellos ya tienen bastante con lo suyo. Que ya cuando haga sol, ya se pasan por España, o Grecia, pero que eso de que vayan extranjeros a su país que no les mola tanto… Si total, allí no hay nada que ver, y no hay sol, y la paella tiene chorizo… ¡Chorizo! Y va el primer Ministro y dice que se enfada y no respira y que se va y ponen a una señora para que se coma el marrón (brownie, lo llaman allí), y la señora, pues le toca hacer amiguitos ahora… pero no le hablan porque se han enfadado con ella. Ahí la tenéis mirando a ver si la “ajunta” alguien.


Pokémon Go

Todos sabemos ya lo que es ¿verdad? Un juego en el que… hay que, tienes que… Se hace difícil explicar algo cuando no tienes ni idea de lo que es… Se nota que no soy político, ellos lo hacen todos los días y encima cobran por ello. El caso es que es un juego en el que tienes que buscar unos bichos de colores y cazarlos con el móvil. Pero ni son bichos de verdad, ni te los puedes comer, ni tenerlos de mascota ni nada. Dicen que es todo virtual… o sea que te están tomando el pelo, pero al decir que es virtual no te sientes tan idiota.  Porque ya me diréis que sentido tiene pasar el día, tú y 100 millones de personas en la Gran Vía buscando un conejo, o una liebre, o lo que sea, de color amarillo con la que no puedes hacer nada… A mí me da que las teorías de Darwin y la evolución sólo servían para los animales. Los humanos vamos para atrás.  




Trump

Aún no es presidente y ya se ha metido en jaleos con los Americanos del Norte, del Sur, del Este y del Oeste. A los chinos ya les ha cabreado también… Y eso que no se entienden, que si no… Tantas encuestas, estudios, artículos, de gente que parecía muy lista diciendo que no, que no va a ganar y ¿ahora qué…? Que si la nueva presidenta va a ser Pilarín Clinton. Que si el representante republicano será Cruz, o Marco Rubio, o Bush (el hermano listo, el que fue presidente no, el otro) o… Y se los ha cargado a todos (no literalmente… todavía). Y se va a vengar de todo. Ya veréis cuando se entere de dónde está España.   


David Bowie, Leonard Cohen, Prince

Como ya os dije antes, en este año ha muerto gente que estaba viva. Es básicamente el único requisito para morirte. No puedo engañaros y decir que Leonard Cohen cantaba muy bien. Tampoco era muy alegre ni le daba el repertorio para cantarse unas sevillanas. Más bien rapeaba… muy despacito, como si estuviera leyendo, y le ponían música para ambientarlo un poco. Bowie ya era otra cosa, ¡Qué le gustaba disfrazarse y pintarse! Era como el marido de Alaska, pero sabiendo cantar, componer, y actuar…. (pensándolo bien, sólo se parecían en lo de disfrazarse) y luego ya Prince. ¿Por qué? Un tío que tocaba todos los instrumentos y lo hacía bien. Lo mismo le dabas un triángulo, que unas castañuelas, que un piano o una guitarra y ahí te sacaba una canción. Y la cantaba bien. Que si hubiera querido cantar jotas, las habría clavado, pero es que no un género que se diera por la zona de Minnesota. Son más de cantar en inglés. Rarezas de los minnest, minist, menitr.. de los de allí. En el vídeo podéis ver lo bien que se le daba la guitarra… 


Si ganara Podemos

Nos obligarían a aprender a tocar al perro y tener una flauta… ¿o es al revés? ¡Qué más da! El caso es que cerrarán todas las calles y no nos dejarán aparcar en mitad de la calle, o en doble fila, o en mitad del carril bus, como siempre han hecho las personas de bien. Y van a convertir esto en Venezuela e Irán y Cuba y Corea del Norte y Rusia, y otros países. Y todos tendremos que ir con coleta y van prohibir las corbatas y nos harán socios del Rayo Vallecano…


Youtubers

Una de las cosas que más busca la gente en Google es cómo convertirse en Youtuber. Antes el sueño de los niños era ser futbolista, o astronauta, médico.  Pero quién quiere ser algo así pudiendo tener tu canal en Youtube, y tener un montón de visitas (pero de las virtuales, de las que no tienes que sacar un café, ni pastas, ni nada) y dices cosas como cool, lol, flow, y otras que tengan muchas oes, ¿o se dice “oses”?  Eso sí, te arriesgas a que te den un bofetón con la mano abierta… Y es que a la gente le sienta muy mal que un niñato les insulte por la calle y encima quiera forrarse con ello.


Los Juegos Olímpicos

Cada 4 años se junta gente de todos los países para jugar a cosas raras. Como al rescate o al balón prisionero, pero que son olímpicos. Y hacen gimnasia juntos, o dan vueltas a un estadio de fútbol mientras que no hay partido, y otros tiran bolas de hierro, o discos (que son como CDs pero sin música ni nada, no los han grabado) o jabalinas. A otros les da por saltar, unos a lo largo y otros para arriba y así hasta un montón de deportes y a los que lo hacen muy bien les dan medallas. Que a mí en el cole me daban medalla hasta quedando el último… Algo agarraos son los de los Juegos estos. Que ya podrían comprar medallas para todos.

Más cosas que busca la gente

No a todo el mundo le da por buscar Pokémons. Hay otros que buscan en Google cómo ser feliz, o cómo encontrar la pareja perfecta, o cómo ser inteligente… Ya os digo yo que muy inteligentes no son, si se ponen a buscar por Internet.  Otros quieren saber cómo ser modelo, o ser rico, o como saber si estás embarazada, lo de ir al médico ya está pasado de moda ¿verdad? También hay gente que pregunta cómo saber si un huevo está malo… prefiero no saber de qué huevos habla. Pero lo más poético es qué pasaría si no hubiera luna o si no hubiera sol.

Mis respuestas

No todo se lo vamos a dejar a Google. Quiero aportar mi granito de arena y ayudar a aquellos que pregunten lo de la luna o el sol. Sin luna no habría ese toro “enamorao”, que abandona por las noches la “maná”. Si no hubiera sol no podríamos ir a la playa. Ya me dirás para qué vas a ir si no. ¿Acaso va la gente por la noche? Y se extinguiría Benidorm, y los señores mayores que van allí a hacer aerobic, y eso sí que no.




Como veis, soy una persona preparada y con estudios, pero prefiero tener una segunda opinión y seguir consultando a Google, por si acaso.

Y una vez hecho el resumen de 2016, vamos a ver que nos depara el 2017.  A pesar de lo malo que ha sido este, se ha pasado rápido ¿no? Yo de momento, me voy a tomar un descanso para prepararme para el año que viene. Que está aquí al lado.

Nos leemos en enero ¿vale? Os estaré vigilando. 


10 consejos para no enfadarse o el año en el que no habrá rebotes

$
0
0
Todos los años comenzamos con nuevos deseos, proyectos, ilusiones (qué mala rima tiene la palabra) y a veces hasta con una lista con todo lo que queremos hacer el año que entra. Por cierto, ¡Feliz Año a todos!


Lo de aprender a fumar en inglés mientras vamos al gimnasio ya lo he probado otros años. Incluso he llegado a dejar de fumar e ir a hacer deporte en un sitio en el que sólo me hablan en inglés (suck this tangerine, o lo que viene siendo en idiomas, chúpate esa mandarina). Pero mi propósito de este año y sobre el que os voy a dar algunos consejos es el de enfadarme menos.


No es que a partir de ahora me vaya a vivir al país de la piruleta, Glorieta de la Gominola, pero al menos voy a intentar cabrearme mucho menos… Y os voy a contar cómo voy a hacerlo, por si os ayuda.

Hacer menos caso a las noticias

No es que vaya a ver las noticias y luego no haga caso. Como cuando dicen en verano que hay que beber agua y que cuidadito con salir a la calle cuando hay 50 grados a la sombra. Menos mal que avisan, que si no, nos daba por ir a correr por Sevilla a las 3 de la tarde. Me refiero a estar informado lo justito. Qué tiempo hace, estar al tanto de que no ha habido un holocausto (lo que quiera que significa la palabra) por mi barrio, saber si ya ha empezado la Tercera Guerra Mundial o si Trump está a punto de apretar al botón rojo… ese que pone Don’t push, pues él, ya veréis como no puede evitarlo, “pusheará” y adiós muy buenas, santas pascuas plín (siempre quise acabar una frase así). 


Hacer aún menos caso a según qué noticias

Y la culpa es mía. ¿Pues no voy y me cabreo leyendo algunas noticias? Pues dejo de leerlas y/o verlas y ya. Y casi siempre suelen ser las mismas. Las que hablan de política. Lo mal que lo hacen unos, y lo mal que lo hacen otros. Pues anda que éste, y anda que el otro. Y entre los unos y los otros, me quedo con los de en medio. Y no, no me refiero a los del centro, o los que dicen que son de centro, o marxistas liberalistas o centrocampistas. Yo no vuelvo a leer noticias sobre política nacional, internacional o interestelar hasta dentro de 4 años, cuando lleguen las elecciones.


Hacer muchísimo menos caso a según qué noticias y qué medios

Conozco gente que querría que cerraran algunos medios de comunicación. Generalmente son los que dicen lo que no quieren oír.  ¿No creéis que es más fácil pasar de ellos? No hace falta que los cierre nadie o les censuren, con no comprarles, o leerles, eso que te ahorras. Aunque haya medios de comunicación que son peores que un cuñado en nochebuena, al menos del medio te puedes librar. El cuñado lo tendrás que aguantar la próxima Navidad… ¿O quizá eres tú el cuñado?


No leer comentarios

Uno de los secretos de la felicidad es no leer comentarios en los medios de comunicación o en redes sociales. ¿Por qué crees que los monjes budistas son más felices? Porque no leen los comentarios del Marca, o se meten a comentar noticias sobre el PP o Podemos… o no Podemos. 


Procurar que la vida del prójimo no esté tan “prójima”

No me refiero a los más “prójimos”, mi familia y amigos, sino a los otros menos prójimos. Por regla general no me interesa casa nada la vida de la prima de un famoso, o de la nueva novia del hijo de un cantante, o en general de la vida del cantante. Y es que soy mucho más feliz sabiendo que el cantante no se ha divorciado, que los divorcios me ponen muy triste. Tampoco me ayuda nada saber que un actor se va a casar, o que se ha ido a vivir con su pareja. Que igual me invitan a la boda y ya sabemos que esas cosas cuestan una pasta. 


Fútbol es fútbol

Los que me conocéis sabéis que me gusta mucho el fútbol. No sólo mi equipo y que gane, que también, sino el noble arte del balompié (esta frase me la ha escrito Matías Pras Pradre, el señor de las gafas negras que comentaba partidos. Lo que quiero decir es que no quiero saber si Cristiano se peina con raya al lado, si Messi se peina sin raya, o si Simeone se pone rayas de pelo. Lo que quiero es ver el partido y ya. No que se pasen 10 días hablando del penalti, o del fuera de juego o si el árbitro era de tal o cual colegio. Deberían coger a los árbitros más mayores y que hubieran dejado el cole. 


Las redes antisociales

¿No tenéis la sensación de que no hay término medio en las redes sociales?  Hay gente que sólo las utiliza para decir que no para de trabajar, lo poco que ha dormido, quejarse del resto del mundo…. Otros, “sin en cambio” sí que viven en la calle de la alegría, que es donde quiere mi madre que vaaaaya, a ver si me sale un novio lo más bonito de España (otra vez me estoy liando). Básicamente su vida es como una película de Disney, en la que no matan a la madre, ni hay madrastras, ni huerfanitas… pensándolo bien, no es el mejor ejemplo lo de Disney). En cualquier caso, no me voy a enfadar con lo que diga la gente en las redes…. Ni cuando las redes ardan.


“Unfollou”

Ya os dije que el inglés lo tengo más que superado, como prueba mi pronunciación fluida. El caso es que hace tiempo mis padres me dijeron que tuviera cuidadito de las malas compañías. Y en Twitter y en Redes sociales en general pasa lo mismo. ¿Por qué nos empeñamos en seguir a gente que nos cae mal y luego criticarla? Es como si en la vida real fuéramos detrás de alguien para decirle qué feo es, la de tonterías que hace al cabo del día, criticar su ropa, su forma de hablar… Habrá gente que lo hace, pero es que no quiero seguir enfadándome. No quiero a nadie angry, ni a los pájaros, que te hacen perder mucho tiempo. 


“Follou”

¿No es mucho mejor estar con amigos que con gente que no te gusta nada y que además te hace sentir mal? Pues en las redes voy a hacer lo mismo. ¿Por qué ir detrás de gente que está quejándose todo el tiempo? No más tristes en mi vida o como se dice en inglés, “nou mor tristres in mai laif”. A las redes se viene meado, cagado y descabreado. Sólo voy a seguir a los que me hacen la vida más fácil y me hagan reír y a las cosas cuquis. 


Cuento con vosotros

Para dejar de enfadarme cuento con todos. Pero literal. Contar de verdad. Del verbo contar 1, 2 y 3 y así “sustantivamente”. Cuando vea que me voy a enfadar empiezo a contar, y cuando ya no me acuerde qué número va después, se me pasa el enfado. Ya veréis. Probadlo, siempre funciona… o casi siempre.

  
Yo de momento, este año no me he enfadado… demasiado. Bueno un poco. Sólo un par de veces, pero nada serio, o sí… El caso es que tengo todo el año para perfeccionar la técnica.  Ya os iré contando.


Mi infancia son recuerdos de un patio del colegio o el reencuentro

$
0
0
El patio de mi colegio era particular y cuando llovía se mojaba como los demás, pero no había huerto, claro, ni limonero, ni nada (igualito que el de Machado que lo tenía a todo confort). Sólo porterías de balonmano y fútbol sala, y fútbol, y rugby y tenis de mesa, voleyball, y todo lo que se te ocurriera. También hay canastas de baloncesto, y un montón de rayas. De las que se pintan en el suelo, aunque de las otras seguro que también había, pero no nos dábamos cuenta, porque éramos muy pequeños, y el patio era muy grande.


Ahora el patio es mucho más pequeño, o nosotros somos más grandes… El caso es que todo esto viene porque hace unos días, volví a ver a uno de mis amigos de la infancia.


Esas cosas típicas que pasan. Que los que vuelves a encontrar por Facebook. ¿Qué es de tu vida? Por aquí todo bien. A ver si quedamos. Tenemos que vernos. Claro que sí. Dame tu teléfono que te añada al “guasap”. Ya estamos conectados. De verdad que tengo muchas ganas de verte. A ver si coincidimos. Voy para allá. Pásate por el barrio y ya de paso ves a más gente… 

La mayoría de las veces es que no, pero esta vez fue que sí. Y os paso a relatar las cosas que suelen pasar cuando dos amigos se vuelven a ver.  



Antes de empezar, quiero avisar de que no todo lo que os cuento a continuación pasó en la realidad. Algunos pasajes son inventados… porque la realidad es casi siempre mucho más divertida que la ficción.

¿Qué me pongo?

Estoy hablando de que hayas quedado previamente para verte. Si te encuentras a un amigo por casualidad, es probable que también vayas vestido. A lo que vamos. Que no sabes qué ponerte. ¿Una camisa que me tape la tripa? Ropa apretada para que se vea que estoy apuntado a un gimnasio (y que voy y se me nota).  ¿El peluquín para que se disimule la incipiente calvicie? ¿Desenfadado para que no se note que tengo más años que la tos? ¿Arreglado para que todos se den cuenta de lo bien que me va? Y al final te pondrás lo de siempre (que en cada caso será una cosa diferente… ¡Qué lío!).


 ¿Y aquí cabíamos todos?

Y vuelves al barrio o al pueblo, donde quiera que tengas tus recuerdos… Pero si hace mucho que no has vuelto al sitio de tu recreo, tus recuerdos serán distintos. Esa plaza en la que jugabais a las chapas, mientras las chicas saltaban a la cuerda, y los chicos mayores echaban un partido de fútbol (30 contra 29), aquella vecina del quinto (que no estaba tan buena, pero a ti te parecía como Charlize Teron) y el novio (siempre de otro barrio) se daban la paliza, y los alegres jovenzuelos de los ochenta trapicheaban con… (mejor no sigo)… Ahora ya parece que sólo caben dos bancos y un par de amigos. ¿De verdad cabíamos todos aquí?


El Bar de la Plaza

Y llegas al bar de la Plaza. Ese donde ponían las mejores patatas bravas del mundo y que tiraban las cañas como nadie (ahora te dan ganas de tirar las bravas). Y ya no conoces a nadie de los que había allí. Los dueños ya no son el bigotes y su mujer (nunca supimos el nombre y la llamábamos la mostacho… ), son dos chinos que ponen las bravas a “Tle cualenta” euros la ración. Y llegó el encuentro.


Conocimiento

Quizá me he precipitado con la imagen anterior. Si hace mucho que no os veis es posible que hayas perdido el conocimiento… Que no es que te desmayes por ver a tu amigo. Me refiero que puede ser que no le conozcas. Bien sea porque habéis cogido unos kilillos (exactamente 100 entre los dos), o hayáis perdido pelo, o todo a la vez. Y es cuándo te sale un hilillo de voz, y te atreves a preguntar ¿Amigo? (cámbiese la palabra amigo por el nombre del amigo en cuestión). También se le conoce como el momento Mocedades o ¿Eres tú?


Intercambio de interjecciones de alegría

Quizá interjecciones es una manera muy educada de expresar lo que se dicen dos amigos que hace tiempo que no se ven. Pero como de momento no hay censura, paso a enumerar algunos ejemplos. “¡Cagüen la puta!” ¡Qué alegría, la hostia! ¡Qué gordo estás hijodeputa! ¡Pero si tenías más pelo que Chewbacca y mírate ahora cabronazo! ¡Tronco! ¡Tienes la misma cara de pringao que antes!  


Primeras impresiones

Es como volver a la primera conversación que tuviste a través de Facebook o como quiera que te encontraras. 50 “Qué tales”, 30 “qué alegría verte”, y ya dependiendo, estás igual hijoputa, o cuánto has cambiado, si te veo por la calle no te reconozco…


Al tema

Una vez que se ha pasado la euforia del momento llegan las conversaciones más serias, trabajo, matrimonio e hijos, por ese orden… O en otro, pero que van a salir en la conversación está claro. Y no te puedes creer que este con el que estabas jugando y haciendo trastadas, pueda ser un padre responsable, o estar casado con nadie. No puede ser, pero si hace nada estábamos….


¿Y la familia?

¿Qué tal tu hermana?  - Era mi hermano.  –Es verdad. Julián ¿no? – Antonio. Bien está bien. ¿Y tus hermanos? – Si yo soy hijo único. – ¿Seguro? – Creo que recordaría tener hermanos ¿Y tus padres? - ¿Bien y los tuyos?... Aquí lo dejo porque llegará un momento en el que tiene que haber un silencio incómodo hasta que…


 ¿Te acuerdas de cuándo?

Y por fin llegan los recuerdos del patio del colegio, y de cuando hiciste esto y lo otro (que cada uno ponga sus propios estos y los otros. No lo voy a poner yo todo). Y te vuelves a reír como si lo estuvieras viviendo de nuevo. Dos señores hechos y derechos descojonaos por cosas de niños. Y lo bien que sienta ¿qué?


¿Qué fue del chino? ¿Y del bola?

Si no tuviste algún amigo que le llamaran el chino, no has tenido infancia ni nada. ¿Y qué me dices del bola, el ojos, el negro, el rubio? (no confundir con el rubius, que ese ya tiene muchos amigos). En mi barrio los teníamos a todos, pero seguro que no todos conocíais a un Pirin (de Pirindolo) o a los Burbujas Bros (dos hermanos que jugaban al waterpolo y pasaban mucho tiempo en la piscina). Y así te puedes pasar horas y horas recordando las historias de cada uno de ellos, sus trabajos, si siguen por el barrio, si seguís el contacto... y ahí te das cuenta que la vida se pasa volando y lo más importante, que el que era raro con 14 años, ahora es aún más raro, y más mayor. 


¿Qué será del pingüino? ¿O de la avutarda?

No es que te haya dado de repente por pensar en los animales. Eran algunos de los nombres de los profes. O del lince, aquel profesor de matemáticas que se quedó con el mote por su agudeza visual (20 dioptrías) y su andar ligero (tenía una pierna más corta que la otra). Y es que éramos muy crueles con la fauna del cole, Pero también había otros motes, como el Mortadelo, Doña Croqueta, Don Pimpón, El mitad y mitad…

Va a ser momento de recogerse

Ya has pasado por todas las fases. Es hora de ir haciendo un resumen de las mejores jugadas, volver a recordar al resto de amigos, prometerse que no van a pasar 30 años en volverte a ver. Que seguiréis en contacto, que vais a tratar de avisar al chino, y al negro, al bola, bueno al bola no, que era un “turras”, y veros de nuevo muy prontito.  ¿Prometido?

 

Se lo dedico a todos mis amigos que me estarán escuchando.... hasta el Bola, que en el fondo era buen tío.  



¿No se os está haciendo largo lo de Trump en la Casa Blanca?

$
0
0
A él también. De verdad. Lo ha dicho nada más llegar. Y no hace más que repetirlo. Que vaya rollo, que yo he venido aquí a mandar y todo el mundo me dice lo que tengo que hacer, que si no puedo invadir países, que no puedo apretar el botón nuclear, que no puedo despedir a todos en la Blanca… Que si lo llega a saber no se presenta.


¿Os preguntaréis que cómo me he enterado de esto? Lo siento, pero no puedo revelar mis fuentes. Tendría que mataros a todos y ya bastante tenemos con lo que nos ha caído encima como para ponerme a iros buscando uno por uno. Que algunos vivís muy retirado y me iba a salir la broma por un pico. 

Perdón, creo que me ha poseído el espíritu de Trump… Por si no lo sabíais ya ha tomado posesión… O sea que estamos todos poseídos también.


¿Queréis saber algunas de las cosas que le han pasado a Trump en estos días? Ya os aviso que son noticias que no quieren que sepas, lo van a intentar ocultar todo. Ni siquiera los medios más influyentes y serios como La Razón y El Mundo Today te lo van a contar.

Aquí hay que hacer reformas

Ya sabéis que este hombre tiene tendencia al dorado. Que su casa parece que se la ha decorado Diego El Cigala. Oro y más oro, y debajo, plata y piedras preciosas. ¿Para qué sirve ser rico si no se nota? ¿Qué es eso de “guait jaus”? Eso suena muy racista. A partir de ahora toda la casa naranja. Que es un color muy bonito y queda muy bien con cualquier cosa. Y fuera todos los cuadros de gente antigua. Que estamos en el siglo XXI. A tomar por saco señores de otros siglos. ¿Que también eran presidentes? Así nos ha ido hasta ahora. Yo voy a hacer América grande otra vez.


Ponme en la agenda invadir Canadá y México

Vale, ya lo he entendido, lo del muro no va a poder ser. Pues se les invade y ya está. Canadá para ir a pasar allí los veranos que hace más fresquito y México para el invierno. Voy a dejar todo aquello como Marina D’Or pero con estilo de verdad. Muchos hoteles, enormes, con miles de habitaciones, millones de habitaciones y todas con vistas al mar, y si no hay mar se pone, y con televisión, pero de la buena, de la que no emita noticias falsas, y en inglés. Porque todo el mundo hablará inglés. Qué es eso de que cada uno hable un idioma diferente. Que se les entienda, que hay gente que habla para que no sepamos lo que dicen.


Creando empleo

Todos a trabajar en los hoteles. Se acabó el paro. Todo el mundo sabe hacer la cama ¿no? Bueno, yo no, que a mí me la han hecho siempre, pero para eso soy el Presidente de los Estados unidos. No voy a ponerme a servir a la gente. ¡Estaría bueno! Aquí se hace lo que yo diga. Y profesores de inglés para enseñar a todo el mundo a hablar como Dios manda. God bless America! Y nada de acentos diferentes. Si los ingleses no saben hablar correctamente, les daremos clases. A un precio apañadito… Eso sí, los mexicanos al final van a pagar algo, a ellos les pondremos las clases más caras.


Lo del racismo

Ahora que lo decís. Ya está bien de decir que soy racista. Al que lo vuelva a decir, a la cárcel le mando, con todos los negros, que esos sí que son racistas, que tienen hasta otro color. Y tampoco se les entiende cuando hablan. ¿Y los chinos? Hablando de chinos, el maletín ese que dicen que tiene el arsenal nuclear ¿Cuándo voy a poder apretarlo?


¿Que no puedo dar al botón?

Soy el Presidente de los Estados Unidos y pago mis impuestos y … Bueno, no pago mis impuestos, que para eso soy rico. El caso es que a ver cuándo me traen ese maletín y le doy su merecido a los chinos, japoneses y los de Vient, Viet… coño, los pequeñajos esos que tienen cara de recién levantados. Van a pagar por lo de Normandía… ¿O eso era en otro sitio? Pues nada, un “cobete” a cada sitio, a Japón, a China, donde los “charlis” de la peli de Rambo, a Normandía y a Pearl Harbor, donde quiera que esté. ¿Para qué tenemos los misiles, los lanzamisiles, y portalanzamisiles y los barcos esos largos para portar portamisiles o como se llamen. ¡Quiero el maletín ya mismo!


Invitar a Vladimir

En un rato llamáis a Putin que tenemos que hablar de nuestras cosas. Asuntos de presidentes. Cosas que vosotros no podéis saber porque son secretos de estado como por ejemplo cortar suministro de gas a algún país, o intercambio de espías. ¡Qué gran tipo este Putin! Dicen que en Rusia no hay homosexuales, que allí son todos muy machos. Ahí donde le veis empezó en la KGB. No estoy muy seguro, pero creo que era un banco soviético, como sucursal del BBVA o algo, y ha llegado a ser el puto amo en Rusia. Haciendo Rusia grande otra vez. Como si fuera pequeña.. Pues él, la va hacer más grande. Si al final habrá nada más que dos países. Todo mucho más fácil, ¿Para qué hacer Juegos Olímpicos con tanta gente? Lo que me parece es que esta gente tiene mucho tiempo libre. Si estuvieran trabajando en lugar de andar corriendo sin sentido, o jugando a cosas que nadie entiende como el fútbol…


¿Queréis cortar el fucking phone?

¡Qué gente tan pesada! ¿Pues no me están llamando presidentes de otros países? Que algunos no hablan ni inglés, y seguro que ni son países ni nada. Me ha llamado uno que dice que es rey. El Rey León ¿no te jode? Y que tengo que ser amable con ellos. Diplomacia le llaman. ¡Mis cojones! Yo no he llegado hasta aquí para hablar con gente que no me apetece. ¿No pagamos a los funcionarios para eso? ¿Decís que los funcionarios y mi sueldo, se paga con impuestos? Pues a subir los impuestos y aquí va a pagar todo el mundo. Y si vuelve a llamar uno que dice que llama de “Shhhhpain” no me lo pases que no le entiendo. Que le llame algún latino y ya me hacéis un resumen.


¿Hay que trabajar los fines de semana?

No me jodas que no me puedo ir a casa el viernes por la tarde. ¿Qué tengo que vivir aquí todo el tiempo? Lo que me faltaba. Y con estos criados que hay aquí que no puedo ni despedirlos ni nada… ¿Cómo? ¿Que no son criados? Este país se va a la mierda… ¡Llamad a la rubia! No, a Melania no, a la otra. La que se presentaba a las elecciones. La mujer de Clinton. Que si quiere que se quede con esto, que esto es un infierno. Y me traigan el avión que yo me piro. Esto no está pagado con dinero... Bueno sí, pero no suficiente. 


Finalmente no llamaron a Hillary, y parece que le van haciendo entrar en razón. De momento ya no se despierta por la noche pidiendo el maletín, ni quitando cuadros de todas las habitaciones, ni va despidiendo a gente por los pasillos de la Casa Blanca.


También le han convencido de que no puede estar contestando y criticando a todo el que diga algo en su contra. No tendría otra cosa que hacer… Aunque pensándolo bien, mejor que esté con Twitter que tocando botones, invadiendo países, construyendo muros o haciendo reformas en la Casa Blanca ¿Verdad?

¿Miedo yo? Pues un poco sí, pero poco

$
0
0
Hace unos meses os contaba en el blog cosas que dan más miedo que Jalogüín, como una carta del  Ministerio de Hacienda o las actualizaciones del ordenador. Pero en realidad hay cosas que dan más miedo. Y a más gente. Y es que todos somos un poco cobardes gallinas capitán de las sardinas.


Y así amiguitos es como algunos todavía siguen insultando a los que tienen miedo. Las gallinas tenemos claro que no son muy valientes, pero ¿Qué tenéis en contra de las sardinas? Y menos de sus capitanes. Ella por lo menos no tienen claustrofobia y se meten en una lata (quiero pensar que no por iniciativa propia) y saben nadar en el mar, y donde cubre. Mucho. Muchos valientes ni siquiera se meten en la piscina. 


No pasa nada por tener miedo. La moda esta de superar los miedos y salir de tu zona de confort, que no, no es la salita, que parece que están hablando decoradores de casa. Pues no lo puedes evitar y tienes miedito.


Os voy a hablar de las cosas que a mucha gente le aconjo…, acongon..., les acojong… vamos, que se cagan... Yo no… O bueno, un poco sí.   

Arañas

Las arañas. Son feas, muy aparatosas, con tantas patas. Ahí en el techo. Da cosa mirarlas, pero tampoco es para tanto. Si no hacen nada. Bueno sí, dan luz, pero según está la luz igual es para acojonarse un poco. ¡Ah! Que os referís a las arañas, a los bichos vivos. Entonces sí. Mira lo que le pasó a Spiderman, que le picó una y ahora tiene que ir por la calle en mallas como si fuera un runner cualquiera. Llamando la atención y poniendo todo perdido de telas, que eso luego hay que recogerlo. Que no es que las tenga miedo, pero… Y ahora es cuando se suele decir que más que miedo es respeto. Viene a ser lo mismo. Te cagas, pero de forma educada. Y es que todos sufrimos un poco de “arañofobia”.


Oscuridad

Hay gente que tiene más miedo a la luz. Más concretamente al recibo de la luz. Menos mal que ya está lloviendo y va a bajar la factura. Hay señores que me dan miedo también, pero esa es otra historia. El caso es que lo peor de la oscuridad es que no ves. Que si vieras, sería otra cosa. Y yo el miedo es a pegarme en el dedo pequeño del pie, un imán para buscar muebles y patas de sillas y otras cosas solariegas (dícese de cosas del suelo). Pero por lo demás no tengo miedo. El careto facial también sufre mucho en momentos de oscuridad. Las puertas tienen una propiedad gravitatoria. Todo cuerpo que no ve, experimenta una atracción a darse directamente de morros y es proporcionalmente grave dependiendo de la velocidad. La fórmula exacta no me la sé, pero es algo así como H de hostión es igual a la gravedad del golpe partido por la velocidad y el cuadrado de la puerta con la que te des.


A los fantasmas

Esto es todo un clásico. Hay gente que dice que no existen, pero sí. Y algunos han llegado a gobernar países, y otros acaban de empezar. Y no vamos a seguir hablando de Mr. Orange. Esos sí que dan miedo. Los de la sábana no. Estos son buena gente. ¿Qué es lo peor que te pueden hacer? ¿Arroparte? Que pueden llegar a ser molestos, pero luego no hacen nada… Esto también puede aplicar a los fantasmas que no llevan sábana… A veces.


Miedo a volar

Mira lo pequeñajos que son los gorriones y no les da miedo. O a los “colibrises” que son más pequeños todavía. Y nada… Y señores más grandes, que no se atreven. Si ya nos referimos a volar en avión, o a las alturas se puede llegar a entender.  Un cacharro lleno de gente a muchos miles de “pieses” de altura (más pies que los hermanos Gasol juntos) y en medio del cielo, dándole el aire y la lluvia y expuesto a las inclemencias del tiempo. (¿Os habéis preguntado alguna vez cuáles serían las clemencias del tiempo). Y eso también da un poco de respeto.


A los tiburones

Sí sí, que tú crees que en la vida no te vas a cruzar nunca con uno y eso no se sabe. ¿Quién le iba a decir al tío de la imagen anterior que se iba a encontrar con un tiburón en un avión? En realidad ni al peor guionista se le ocurriría, pero mira, han hecho varias películas. Y es que hay que estar preparado para cualquier cosa. Dicen que los tiburones huelen la sangre y el miedo. Mientras no sangres y no tengas miedo cuando te le encuentres, todo va bien. Ahora ya, si tienes un padrastro o él ve que comienzas a acongojarte, estás jodido. Ya puedes correr. Pero normalmente son animales muy nobles y solo quieren jugar.


Perros

Hablando de animales nobles. Pero esto es como todo, que hay bichos que están “grillaos”. Normalmente te cruzas con un perro y te huele un poco y no pasa nada. Como las personas. Bueno, hay personas que no huelen (otras sí) y te las cruzas y no pasa nada, pero hay otras que también están grilladas y es mejor que no te pongas en su camino. El caso es que hay que tener respeto a todos los animales. Y a las personas. ¿Os que no te enseñaron en el cole que había que respetar al prójimo? Pues los perros son también prójimos.


A quedarte encerrado

Lo de la fobia a quedarte encerrado en un claustro, también llamado claustrofobia es comprensible. Y estar atrapado en un ascensor, también. Y depende de con quién, peor aún. Yo siempre he tenido miedo a una vecina. No es que sea una mujer poco agraciada o peligrosa. Es al olor. Seguro que todos conocemos a alguien que no ha visto una ducha más que en la tele y otros, en cambio, se bañan en colonia. De todas las marcas. Es el caso de la vecina. Que el ascensor termina oliendo como la planta baja de El Corte Inglés. Que no sabes dónde meterte.


Las agujas

No entiendo a la gente que le da miedo las  agujas. Pero a las que me van a pinchar. No a todas. Por ejemplo a las del reloj nada. Ni a las que se utilizan para hacer punto. A las del dentista ya me va haciendo cada vez menos gracia. Realmente lo que tengo miedo es a los que no saben pinchar. Y a esta señora, aunque sepa poner “indiciones”.


Sangre

Depende de la cantidad. Si es como en la peli de Carrie que ahí hay sangre como para hacer morcillas como para un anuncio de Villarriba y Villabajo, pues no me hace mucha gracia. Otros se desmayan con una gota (ya hemos dejado de hablar de morcillas). Y otros no tienen sangre, como algún que otro presidente de gobierno. Yo creo que me da más miedo la falta de sangre. Pensadlo bien.


Al cambio

Tampoco pasa nada por tener cambio. Llevar algo suelto siempre está bien. A veces es necesario tener monedas, Por ejemplo en el autobús, o para aparcar.  Si ya estamos hablando de otros cambios, ya acojona un poco más, por ejemplo ver a gente conduciendo en cuarta a 100 kilómetros por hora y mete primera. Pues ese cambio da mucho miedo, porque se puede cargar el coche y a todos los que lleva dentro. Pero el cambio en sí, es bueno. Menos cuando se operan algunos famosos, que no hay quien les conozca.


¿Veis como no pasa nada? No hay que tener miedo. Si lo piensas bien sería muy difícil quedarte encerrado en la oscuridad de un ascensor con un tiburón  un perro con agujas y un fantasma con arañas volando. Siempre hay que pensar en positivo.




Lo mío es peor y no digo nada

$
0
0
¿Os acordáis de cuándo éramos pequeños y cualquier herida, por pequeña que fuera, era la peor de todos los tiempos? Daba igual que fuera una rozadura en la rodilla. Que tu amigo se hubiera caído desde un quinto piso y se hubiera roto las piernas o los brazos… ¿Cómo vas a comparar? Lo de la rodilla es mucho peor.


Pues de mayores seguimos haciendo lo mismo. No hay peor dolor que el tuyo. De pequeños enseñábamos la rodilla. ¡O mejor! Un dedo. Y si llevaba una tirita, mucho mejor. Así podías ir mostrando el dedo a todo el mundo para que supieran que estabas sufriendo. Que tu dolor era el más doloroso. Y aunque no sabías expresarte, ahí tenías el socorrido “Mía, pupa”. Que no sólo significaba mira que herida tengo. Con esas dos palabras queríamos expresar todo nuestro dolor y solicitar atención. Pues ahora, seguimos poniéndonos tiritas… y eso que sabemos expresarnos.  


Ahora es la parte en la que desarrollo mi teoría. Que por supuesto es mucho peor que la tuya. ¡Dónde va a parar!

Me duele aquí… ¿Sólo ahí?

Y es que hay gente que tiene suerte. Sólo le duele en un sitio. No como a mí que me duele todo el cuerpo. Incluso fuera del cuerpo. Las rodillas, también los brazos, y los ojos, y las manos, con todos sus dedos… y además aquí tengo un padrastro que me va a matar. Da igual los calmantes que tome. No me calma nadie. Estoy mucho peor que Ana Torroja, toda la noche sin dormir.


Yo sí que no he dormido

Seguro que conoces a alguien que no ha dormido nada. Que tú le has visto roncando como un oso pardo y más frito que unos gatos en su cesta viendo el Tour a las cuatro de la tarde. Pero no, no ha dormido. Y claro, lo tienen que decir a todas horas. Menos por la noche, que es cuando les toca dormir, para levantarse por la mañana diciendo que tampoco han pegado ojo.


Ronquidos ¿Tu marido?

Tú no sabes lo que es roncar. Mi marido ronca mucho más, y mejor, y durante más tiempo. Y además canta al mismo tiempo. Pero no cualquier canción. Canta los grandes éxitos de la Tuna. Una noche te acuestas con él y sabrás lo que es bueno. Y serían capaces de hacerte dormir con su marido o con su mujer sólo para demostrarte que su pareja ronca mucho más y que por eso no duermen nada. No se te ocurra quejarte de los ronquidos… En general, no se te ocurra quejarte de nada por la cuenta que te trae.


Hablando de mi marido… o de mi mujer

Si alguien se queja de la parte contraria, Mr. Lo Mío es Peor siempre te va a ganar. Si tu mujer es vaga, la suya lo es mucho más. Si su marido es un triste, el suyo hace que una canción de Los Secretos te parezca que estás en el Carnaval de Río o en la Feria de Abril. Si tu marido es feo, él suyo es el hermano Calatrava que escondió la madre… Por cierto. ¿Quién decidió que uno de los dos era el guapo? ¿Y por qué el otro se dedicó a hacer todos los puentes iguales?


Tú no sabes lo que es la pobreza

Si alguien viene contando penas sobre pobreza, que gana poco dinero… Ahí está Don Usted no Sabe lo que es ser Pobre. Fíjate si seré pobre que a veces me muerdo la lengua para probar la carne. ¿Tu sueldo malo? Mientras no te toque poner dinero como a mí. Porque entre el IRPF, el VHS, la OTI y otras siglas que no sé para qué sirven, al final salgo perdiendo pasta.


¿Has dicho perder?

Hablarme de pérdidas a mí, que soy como Concha Velasco. Voy perdiendo todo. ¿Que tú has perdido a tu familia? Lo mío es mucho peor, yo he perdido a la mía… A ver si me explico. Seguir, siguen vivos, pero no sé dónde están. Yo creo que me evitan y se esconden… Y es que no es para menos.


Mejor no hablemos de la edad

Yo siempre más. Mucho más. Si alguien dice que tiene una edad, el otro tendrá 2 edades. O tres. El más mayor de todos…  Muy enfermo, pobre, sin poder dormir, con una vida matrimonial muy malísima, pero ahí le tienes, aguantando como un campeón con más años que el que pintó las cuevas de Altamira.


En mis tiempos

El tipo del que estamos hablando es el que empieza muchas de sus frases con EN MIS TIEMPOS… que son los mismos que los tuyos pero parece que haya vivido la Primera Guerra Mundial, la Segunda, y todos los capítulos de la Guerra de la Galaxias, en el orden que quieras… También te dirá lo de que él sí que sabe lo que es vivir una guerra. Al paso que llevamos y con los que hay mandando en el mundo me parece que todos vamos a vivir una guerra en breve. Como le dé al de Korea, al señor Un DosTrés, o como se llame, y al americano por apretar botones…. Alguien tiene que venir a poner paz.


¿A que conocéis a más de uno así? Señores y señoras que son siempre más. Mucho más. Te lo explican muy bien en este vídeo… Ellos sí que saben lo que era la pobreza. Y no exageran nada… Aunque seguro que hay gente que cree que lo suyo era mucho peor…





Y si los de fuera no fueran tan listos

$
0
0
El titular no va a pasar a la historia, lo sé. Podría haber utilizado extranjeros en lugar de los de fuera, pero es que es literal, me refiero a todos los de fuera, no sólo de España, sino de la Tierra. 

Siempre pensamos que los de fuera son mejores que nosotros. A no ser que estemos hablando de un pueblo, todos sabemos que es fácil engañar a un forastero. O de los de otro barrio. Los del otro barrio son siempre peores, mucho peores. Mira los zombies, que vienen del otro barrio nada más que para comerse a los de éste. 


Pero vamos a lo que vamos. Ahora es cuando explico mi teoría. Los extranjeros no son tan listos como creíamos. Y aquí también entran los extraterrestres.


Tortilla de patatas


Vamos a empezar por romper algunos mitos. Siempre decimos que en el extranjero son más listos. Si fueran tan listos ¿Por qué no han inventado ellos la tortilla española? Pero la de verdad, no la de poner chorizo y quitarle la cebolla. La buena de verdad. Y para que veáis que tengo más argumentos y no es sólo sangría, y paella. Tan avanzados no serán los guiris cuando lo primero que hacen al llegar a España es quemarse. El caso es cocerse, si no es con el sol, es con el alcohol. Y no saben que al sol hay que estar poco tiempo y darse la vuelta… Como la tortilla.


Mira que hay sitios con sol y se quedan a vivir donde más llueve


Otra prueba para ver que no son tan listos como creíamos. También es verdad que nosotros llegamos antes (por nosotros me refiero a los íberos, los visigodos, los romanos, fenicios… y no por ese orden). Pues van los extranjeros y se van a vivir fuera. Que no digo yo que todos tengan que vivir en Benidorm, pero que hay otros sitios. Pues no, se van a donde fabrican el frío. Otros extranjeros se van a zonas donde ven el sol cuando ponen los teletubbies… Ya te digo que son raros estos extranjeros. 


Tampoco hablan tantos idiomas

Dicen que no sabemos idiomas. ¿Y los guiris? Que algunos no saben más que hablar inglés. Y los extraterrestres, ni siquiera inglés. Tan avanzados no estarán. Si hasta Trump sabe hablar inglés. Pues nada, con los extraterrestres tenemos que ponerles música, o hacer dibujitos para poder comunicarnos. Yo tengo muchas dudas de si los alieneng, alengi, los putos “extraterristras” tienen ni siquiera la ESO o la EGB. El de la imagen es extraterrestre seguro.


Persianas

Otra cosa igual. Tantos avances, tanta tecnología, máquinas para viajar en el tiempo y ni unas putas persianas para que no entre la luz. Y no me valen los antifaces que parece que vas al festival de Venecia o estás durmiendo con el zorro. Persianas, y cortinas como dios manda. Y nadie le ha dado un premio al que las inventó. ¡Qué injusta es la vida!


Astronautas sin fronteras

Nosotros, los terrestres, mandando al espacio a gente con estudios, con FP de electrónica, idiomas, mecanografía, con buena presencia... ¿A quién nos mandan los extraterrestres? ¿A un cabezón con cara de tortuga que sólo quiere llamar por teléfono a la familia? Al menos este venía en son de paz, que la mayoría viene con aviesas intenciones. Siempre a invadirnos, aunque se quedan en Estados Unidos y a España no llegan. Puede que sean listos, pero que vienen con muy mala leche. 


¿Por qué no van a otros sitios?

Lo que decimos. Que no digo yo que tengan que venir a España los extraterrestres, pero podrían ir a la playa, o a esos hoteles a todo lujo y confort del Caribe. Pues nada, se chupan un viaje que dura miles de años luz (que es la unidad de medida que tenemos en España para pagar la factura de la electricidad), cansadísimos, sin estirar las piernas, ni parar a tomar un café o un poco de agua y directamente a invadir. ¡Coño! Para un poco. Relájate y pégate un baño, deshaz la maleta y date un baño en la piscina o métete en el jacuzzi… Directos al grano. Muchas luces no tienen. 


Hablando de luces

No soy yo muy ducho en el tema de invasiones, pero no creo que ir con todas las luces puestas, con el platillo volante a mil revoluciones por minuto, y haciendo más ruido que un camión de la basura a las tres de la mañana, sea lo más inteligente. Que normalmente llegan de noche, pero apaga las luces. Pues no, vienen con los objetos volantes todavía sin identificar (porque no llevan papeles ni nada que un día les van a meter un paquete los guardias civiles...) con las luces largas, las cortas, las de emergencia, las de marcha atrás… Que hay años que la Feria de Abril de Sevilla tiene menos bombillas. ¿Y así pretenden pasar desapercibidos? Lo que digo, muy espabilaos no son. 


No cuidan las formas

Que podrían venir pidiendo las cosas por favor. Todo el mundo sabe que con educación se consigue casi todo. Pues estos nada más aparcar el platillo, salen como locos a la invasión. Ni pedir permiso, ni please, ni dar los buenos días o buenas noches, aunque sea en su idioma. Y así no van a conseguir nada. 


Pues ya veis como se las gastan los de fuera. Que creíamos que eran mucho mejor que nosotros. Al menos pedimos las cosas por favor (algunos), y tenemos cortinas y tortilla.

Aunque pensándolo bien, tampoco es para sacar pecho. También tenemos lo nuestro… En ningún otro país tienen a la Tuna, bienaventurados los guiris que no tienen que aguantar a señores mayores en leotardos… O a nuestros políticos. Los extranjeros tienen a los suyos… Que ya está bien.


Todos somos dependientes, independientemente de quiénes somos

$
0
0
Ya estamos con los titulares que no hay quién los entienda. Son peores titulares que los de la selección masculina de fútbol de Gibraltar. La verdad es que ellos tienen pocos para elegir, entre señoras, niños, gente ya mayor, los que no les gusta el fútbol y que sean de allí, pues les queda los justos para montar un partido. Encima no pidáis que estén en forma y que sepan jugar bien. Va a ser verdad que son británicos J


¿Por dónde íbamos? ¡Ah! Sí. Por lo de los dependientes que quieren independencia. Vamos a ver si me explico. No me refiero a señores que trabajen en una tienda y quieran ser de otro país. Hoy os quiero hablar de que todo depende. Como decía un gran cantante. Bueno, en realidad, era el de Jarabe de Palo… El caso es que entre las cosas que decía, que tampoco decía muchas, pero las “repetía en repetidas ocasiones” alguna dijo interesante. Que si la flaca y todo le parecía bonito, pero también dijo que depende de qué depende, de según como se mire todo depende. 


Que viene a significar algo así como que todo depende del punto de vista de un cristal que se mira… Mejor lo explico con ejemplos. Aunque ya os conté algo sobre la teoría de la relatividad hace tiempo, creo que es necesario volver a recordar el tema.

Sí son sólo 5 minutos

Dirás que 5 minutos son iguales para todos. 300 segundos. Ni más, ni menos (como la canción de Los Chunguitos… ¿o eran Los Chichos?). El caso es que te pongas como te pongas siempre duran lo mismo (y ya no me refiero ni a los Chunguitos, ni al del medio de los Chichos... Por cierto, si se juntaran, ¿se llamarían los Chiringuitos?) ¿Seguro? Pues depende. No es lo mismo correr durante 5 minutos en la cinta, que estar encinta y ponerte a correr… Que parece poco tiempo, pero trata de bucear durante ese tiempo. Mejor no, a ver si luego alguno me demanda por incitar al suicidio.


El tiempo es relativo… dependiendo del lado en el que te encuentres

Seguimos con el ejemplo de los cinco minutos. Pues no hay diferencia entre estar dentro o fuera del cuarto de baño cuando estás a punto de… Bueno, ya sabéis a lo que me refiero, que no hay necesidad de ser escatológico. Lo de llegar a la tierra prometida no es nada comparado a poder entrar al baño cuando de verdad lo necesitas… Algunos tienen muy poca paciencia y quieren entrar aunque esté ocupado.


Canciones que se convierten en Long Plays

Aquí se nota la edad del autor. No hay nada peor que tener que escuchar una canción que no te gusta. Pongamos que Depende. No quiero decir que dependa de nada, aquí no hay dependencia que valga. Me refiero a la canción. Y es que es un puto tostón (esto no está sujeto a opinión, es un hecho, una verdad verdadera). Se te hace más larga que la mili del Cid y toda la discografía de Georgie Dann cantada por un tartamudo.


Si es sólo una cerveza

Y no voy a hablar del típico truco que todos hemos utilizado cuando te has bebido la fábrica de Mahou entera y dices que sólo ha sido una cerveza pero que te ha sentado mal. Hay caña, quinto, tercio y luego beberte todo un barril. También depende de la edad. A los 20 años nada te sienta mal, a los 40 te da resaca hasta el Cola Cao. Tampoco recomiendo a los menores de edad que beban. Ni siquiera cerveza, ni una… Es que algunos empiezan muy pronto. “Si ya sabéis cómo me pongo para qué me invitan”, versión Master Junior.


¿Para qué familia es una pizza familiar?

¿Qué familia tienen los señores que hacen pizzas? O son muy pocos, o no se hablan con nadie. ¿Cómo pretenden que se alimente una familia entera con eso? Que la mía no es muy grande (hablo de la familia, no me voy a poner aquí a hablar de otros tamaños) y somos unos 40 o 50. Y tampoco es que seamos de mucho comer, pero jode, que con eso comen 4 y ya está… Calla… que igual se refieren a eso… ¡Sorry pizzeros del mundo!


Hablemos de tamaños

Tengo menos palabra que un político. Hace unas líneas os digo que no iba a hablar de tamaños y mira. Y es que esto depende. Cómo puede ser que según la marca una talla L te quede más apretado que las tuercas de un submarino y que otra marca necesitas una XXXXXL (que parecen los números que ponen encima de los edificios antiguos). Esto requiere una intervención de las Fuerzas de los Cuerpos del Estado de Seguridad…. Quiero decir de Los cuerpos sin fuerza… Ya sabéis quién os digo. Las autoridades competentes… bueno y las otras, las incompetentes, que para eso les hemos votado.


El humor: ¿De qué depende?

Pues hay gente que siempre está de mal humor, independientemente de lo que pase a su alrededor. Pero me refiero a las cosas hacen gracia o qué no. Porque para ti puede que sea muy gracioso que pierda un equipo de fútbol, y a otro no le haga ninguna gracia. Probablemente dependa de qué equipo seas. O del tiempo. No es que te hagan más gracia las cosas cuando hace sol o llueve, me refiero a que es importante saber cuándo hacer humor. Al que acaba de caerse no le hace ni puta gracia que te rías de él, pero si esperas un poco (preferiblemente a que haya salido del hospital y te asegures de que no ha fallecido), probablemente él se ría también. Descarta la risa si hay defunción. Los muertos tienen muy poco sentido del humor, aunque algunos se mueran de risa.


No sé si habéis cogido la idea de lo que quería contaros. El caso es que una misma cosa puede ser más larga que la digestión de los hermanos Gasol o más corta que el curriculum de Belén Esteban. Al final todo depende del punto de vista de cada uno.


Yo os maldigo, jodíos móviles

$
0
0
No sé si os acordáis de Charlton Heston en El Planeta de los Simios en la escena final, más cabreao que una mona y “maldijiendo” a todos. Pues yo igual, maldigo a los móviles, que tienen la culpa de todo lo que sucede. Antes no había teléfonos inteligentes, ni siquiera un poco listos, y no pasaba lo que está pasando ahora. Si no, cómo os explicáis, que haya llegado Trump a ser Presidente. Pues por los móviles.


Y no sólo lo digo yo. También lo dicen los programas de la tele, y los de la radio y en los artículos de revistas y periódicos (por si no lo recuerdas, son esas cosas que venden en las tiendas con hojas… las lechugas, no, lo otro).


Pues eso, que lo dice todo el mundo. Todo el día nada más que “de mirar” el móvil y no hacemos otras cosas, no como antes que hacíamos…. por ejemplo… Dejadme pensar y ahora vengo.


Te despiertas y lo primero que haces es….

Pues sí, lo primero es mirar el teléfono. No como antes, que nada más despertarte ibas directo a consultar la Enciclopedia Británica o un libro de Freud para interpretar los sueños. La mayoría usamos el teléfono como alarma. ¿No tendrás que mirar el móvil para que deje de sonar? De paso que lo miras quitas la alarma, consultas el correo, ves los últimos chistes que te mandan por Whatsapp y compras acciones de Carrefour en la bolsa… ¿o eran bolsas de Carrefour?. Aún estoy medio dormido.


Desayunas leyendo Facebook y “Pistagram” y escuchando el “putifai”

Yo soy un clásico y sigo desayunando Cola Cao… eso sí, sin droja ni nada, que me pone muy mal cuerpo (la droja, el Cola Cao no tiene la culpa del cuerpo que tengo). Antes la gente desayunaba leyendo el periódico, lo de las hojas que os comentaba antes. Ahora también, pero lo lee en el teléfono y consulta todas las redes sociales y al mismo tiempo tiene la tele puesta y la radio, y un transistor y a veces la tostadora. Y así no hay quien desayune.


¿Para qué vas asomarte a la ventana?

Aparte de para ver a la chica de ayer, como en la canción, ya no te hace falta mirar para saber si hace frío, calor, llueve o si hay atasco en tu calle. Ahora el teléfono te lo dice todo. Lo que vas a tardar al trabajo, el tiempo que hace, te avisa de que el vecino pesado sale al mismo tiempo y que esperes un poquito para no cruzarte en el ascensor con él. Y es que los teléfonos son muy inteligentes ahora. Más que los dueños.


Ya nadie mira por donde va

Eso no es del todo cierto. El teléfono te va diciendo por dónde vas. Pero tú sólo miras al teléfono. Andando por la calle, esquivando gente, deposiciones caninas (lo que viene siendo una… ¿¿¿hace falta que lo explique???) Todos con los cascos puestos. Y ya en el metro todo el mundo sigue mirando al móvil. No como antes que la gente hablaba entre ellos (yo tampoco me acuerdo de aquello) e incluso se formaban corales para cantar canciones de Mocedades entre las estaciones de metro, y se leían libros de filosofía y todo el mundo era amable y te amenizaba el trayecto María Jesús y su acordeón… O quizá no era Maria Jesús, pero sí que había gente tocando. Y el acordeón también.


Hasta para c%&·$%!!

Sí, también te lo llevas al baño. Antes usabas un periódico. No digo que ahora te limpies con… Ya me entendéis. El caso es que ya no hacen falta revistas. Con un móvil tienes todas tus necesidades cubiertas… Todas, todas no, pero casi. Así mientras estas ocupado puedes seguir informándote sobre si la infanta no irá a la cárcel y Urdangarín tampoco… Y te enfadarás y te… bueno, al fin y al cabo te pilla en buen sitio.


Mira qué gracioso lo que me han enviado… por décima vez

Los grupos de Whatsapp merecerían un apartado aparte (nótese la riqueza de vocabulario del escribiente… todo culpa de los móviles, por supuesto). El caso es que si contáramos o contásemos el tiempo que hemos empleado mirando los mensajes de whatsapp ahora mismo todos tendríamos tres carreras superiores, dos inferiores, hablaríamos cinco idiomas, seríamos virtuosos de la guitarra y conoceríamos nuestro planeta del uno al otro confín (lo que quiera que signifique confín. ¿Será lo opuesto a sinfín?)


Reenviando que es gerundio

No es suficiente con recibir la foto del señor de color con falta de presupuesto para comprarse calzoncillos (y es que para tapar eso, hacen falta muchos gayumbos), sino que reenviamos todo lo que nos llega. Vídeos de chistes, chistes sin vídeos, señores desnudos, señoras sin ropa, gatos con ropa cantando sevillanas… Y lo recibirás por triplicado y por tierra mar y aire, y en tu muro de Facebook, por Twitter y ya por último, hablarán de ello en un programa de televisión en el que comentan lo que ya has visto en tu teléfono hace unos días.


Y para relajarme…

Antes te echabas un cigarrito, pero ahora como no se puede fumar en ningún sitio y un paquete (seguimos hablando de tabaco) cuesta casi tanto como un móvil, pues te relajas con el móvil. Y haces un sudoku, o un crucigrama, miras tu Facebook, revisas lo último de Twitter o haces punto de cruz con una aplicación del móvil… El relax se acaba cuando se está acabando la batería.


¡¡Alerta!!

Desde el momento en que se acaba la batería y los cinco minutos (siendo muy lento) que tardas en encontrar el cargador y el enchufe, tu vida carece de sentido. Todo tu mundo se tambalea, ya nada tiene sentido.


Aún hay esperanza

Has encontrado todos los elementos de tu kit de supervivencia (el cargador, la cartera, las llaves y el teléfono) y tu vida vuelve a tener sentido. Realmente no, pero ya puedes usar el móvil de nuevo. ¿Te imaginas que te quedaras en una isla desierta con este kit de supervivencia? Yo creo que no “superviviríamos”.


Gracias por estos alimentos que vamos a fotografiar

Toda comida que se precie debe ser convenientemente fotografiada. ¿Cómo se van a creer mis amigos que he comido una paella (aunque sea con chorizo) si no le hago una foto? Antes podíamos comer sin hacer fotos ni nada. Eso sí, bendecíamos la mesa, por si las moscas.


¿Sabéis qué? Que yo creo que tampoco tienen la culpa de todo los móviles. Los Son como los pimientos de Padrón, que a veces sí y a veces no. Muchos probablemente estéis leyendo este post en un teléfono, otros en un ordenador, y algunos, la mayoría, ni siquiera lo estén leyendo … y todo porque están contestado a un whatsapp, o haciendo fotos a la comida, o jugando con el puto teléfono… ¿Queréis guardarlo en el bolsillo y salir a la calle a dar una vuelta? Pero llevaros el cargador, por si acaso J




¿Y sobre qué escribo yo ahora?… Cosas que pasan todas las semanas

$
0
0
Algunos me preguntáis (no os voy a decir cuántos exactamente para que no os deis cuenta de que me lo estoy inventando) de dónde saco las ideas para escribir en el post. Yo también me lo pregunto.


Y es que hay semanas en las que pasan tantas cosas que no es fácil elegir. Que si se descubren planetas allende las galaxias (¿o allende sólo sirve para los mares?) o que el Presidente dice alguna frase antológica (esto sirve para cualquier presidente de cualquier país, lo que pasa es que a algunos extranjeros no los entendemos…. Y a algunos españoles, tampoco).


¿Queréis saber de dónde saco las ideas? Pero me tenéis que prometer que no se lo vais a decir a nadie. No vaya a ser que se ponga la gente a escribir “blojes” (el plural de blog, es blojes, de verdad de la buena). Como dice Rafa Nadal, vamos.



Las noticias

Esto no os lo imaginabais ¿verdad? Y es que las noticias son una fuente inagotable de noticias, como su propio nombre indica. Y si no, mirad el ejemplo del señor al que le alcanzó un rayo (un rayo de verdad, no uno vallecano, ni de otro barrio). También es verdad que no te puedes fiar de todas las noticias. Mira Trump, que sólo se fía de las noticias que él se inventa… Tampoco hay que irse a Estados Unidos para tomar ejemplos. En todas partes cuecen habas, o cualquier otra clase de leguminosas (¿Qué palabra tan sonora verdad? Si la dices en alto parece que estás insultando a alguien, o que estás haciendo magia o algo)…


Fake news!

Hablando de noticias y del presidente de Estados Unidos, también se pueden hacer posts sobre noticias falsas. El Mundo Today, El Mundo (sin ser Today ni nada), Telemadrid o La Razón, son algunos ejemplos de lo que digo. Si estos señores que cobran por ello lo hacen, ¿Por qué no voy a escribir sobre cosas que no han pasado? Aquí tenéis la entrevista que le hice a un marciano.


Cosas que me pasan

Otras veces escribo sobre cosas que me han pasado. Una vez me quedé atrapado en el ascensor (palabrita del niño Jesús, y os lo conté en el blog). En otra ocasión os describí la visita al fisioterapeuta y los trapecios). Puede que no sea exactamente igual que como lo describo en el blog, pero sí que se parece mucho a la realidad. Para vuestra tranquilidad, hay cosas que aunque pasen, es mejor no contarlas. Esto de contar las que cosas que pasan, que empiezan diciendo, viniendo hacia el teatro, me he encontrado con… Son los que se hacen llamar molonoguis… monogolista… mongolo… Vaya, que no me sale la palabra. Esos que cuentan cosas que les pasan viniendo al teatro.


La vida misma

De la vida misma se pueden sacar muchas ideas. Esta expresión, la vida misma, es como lo de marco incomparable, antiguas pesetas y pertinaz sequía, van de dos en dos, como los “petisuis”. El caso es que de las cosas que tienes a tu alrededor siempre puedes sacar ideas. Solo hay que estar atento… y yo siempre estoy atento… a lo que no debo. Aquí os dejo el ejemplo de la fauna que hay en todas las piscinas. En vez de estar a lo que estoy, me fijo en la gente.


Cosas que no me pasan pero que podrían pasar

Y hay veces que cuento cosas que no han sucedido, pero que podrían pasar. Como por ejemplo entrevistar a Baltasar . Y no será por falta de ocasiones, que todos los años se pasa por casa. En casa siempre hemos sido muy de Baltasar… Lo que pasa es que viene de noche y a mí a esas horas no me viene bien entrevistar a nadie o ponerme a escribir en el blog. Pero por poder, podría pasar. A ver si algún año aguanto despierto y hablamos largo y tendido (hoy estamos tropicales, todo lleno de trópicos J


Cosas que no van a pasar pero que estaría bien que sucedieran

Otras cosas no podrían pasar nunca. Never ever (que ya sabéis que significa jamás de los jamases), como por ejemplo encontrarme la agenda de Ana Botella (como si ella supiera escribir), o hablar con un extraterrestre… y que me entienda. No, no y mil ves no… o a lo mejor puede que quizá.


Invenciones inventadas

Hace muchos, muchos años, más de 2, que se decía Fantasías animadas de ayer y hoy… Pues lo mismo hago yo a veces. Que me invento fantasías y me animo yo sólo (no empecéis con si pongo tilde o no, que yo voy a seguir haciéndolo, porque soy un señor antiguo). El caso es que muchas veces me invento cosas, como los políticos, y a veces tampoco tengo ni puta gracia, como los políticos. Y hasta me invento críticas


Artículos de opinión

A veces hago artículos en los que opino, Lo que pasa es que son opiniones basadas en decisiones poco meditadas… Básicamente lo que vienen siendo chorradas. No demasiado diferentes a las que dicen los tertulianos, nanianos. Como por ejemplo que los ingleses no entienden inglés. ¿Os podéis creer que es de los post más leídos? No, los ingleses no lo leen… Y es que no comprenden nada.


Hay gente que dice

Esto también es una fuente de inspiración. Cualquier frase que comience por “hay gente que dice” se convierte inmediatamente en verdad. No hace falta decir cuánta gente, ni qué tipo de gente, ni siquiera decir lo que dice… Vaya trabalenguas. El caso es que es a veces escribo sobre cosas que dice la gente… como lo de los “estereopitos”….como que los italianos hablan con las manos… ¿De dónde sacarán esas cosas?


Lo que me gusta

Dicen que el secreto para escribir bien es hacerlo sobre lo que te gusta… Así me va, que escribo sobre lo que me gusta, sobre lo que no me gusta, sobre-natural, sobre-saliente,… y todo lo relacionado con los sobres, como los del PP (ya me he vuelto a liar) o los de los oscars (¿o es oscares?) Pero sí, también escribo sobre cosas que me gustan, como mis palabras favoritas… e incluso lo hago es fascículos (I) y (II) y con los fascículos ni regalo tapas ni nada como hacen las colecciones como dios manda.


Hablando de cosas que me gustan y otras que no me gustan… Que espabilao el “Guarren”, se olía el marrón y le da el sobre a ella para que se equivoque ella. Eso está muy feo.


Y ahora que ya os he contado el secreto para decidir sobre lo que escribo, también acepto peticiones, como las orquestas de pueblo. Mientras no me hagáis bailar… Porque ya sabéis que un hombre sobrio no baila.




Las aspirinas gratis y otras ventajas de ser Neandertal

$
0
0
Qué injusta ha sido la vida con los hombres antiguos. Que si no iban limpios, que si su dieta no era equilibrada, que  si estaban muy atrasados respecto a los homosapiens… Pues a lo mejor nos estamos equivocando con ellos.

Siempre insultándoles, que si eres un Cromañón, que si tú más, que si eres un cavernícola y cavernario… Pues anda que tú que eres “neerlandés”  (ser de Holanda, tampoco es tan malo).


Hace poco se ha descubierto que se hacían sus propias aspirinas, gratis, sin pasarse por la farmacia. Igual era paracetamol, o espidifén… Da igual la marca, lo importante es que eran más listos de lo que creíamos.



Hoy vamos a hablar de esta y otras ventajas de las señoras y señores de los de antes. De mucho antes. Más mayores que Jordi Hurtado y la Duquesa de Alba

Aspirinas gratis, sin receta

Creíamos que eran unos ignorantes y ahí les tienes. Se hacen ellos mismos sus gelocatiles. Sin receta, lo de escribir lo tenían un poco verde todavía. También te digo que seguramente los dolores serían distintos. Lo de los garrotazos en la cabeza no ayudaría mucho a aliviarlos, pero no tenían que pensar en la hipoteca, el colegio de los niños…



La factura del dentista

Otra ventaja es que en dentista se gastaban poco. Y además no había dentistas que recomendaran chicles sin azúcar, ni con azúcar, ni dentistas. Garrotazo y tentetieso. Que te sale la muela del juicio y parece que te molesta un poco, a tomar por saco y te la arrancas la muela, el juicio, los caninos y un molar.



La hipoteca

Un poco fuera de la ley sí que eran estos señores y señoras. Ni papeles, ni hipotecas, ni claúsula suelo, ni cielo, ni Bankia ni nada. Y eso que se ahorraban. Que les apetecía irse a vivir a la playa, pues allí que se iban. O a la montaña. Ni pasaporte ni nada. Que dicen que en África hace calor, pues tiramos para Alaska, y así conocían mundo.


Ni Leroy Merlin ni Ikea

Que alguno diréis que es una desventaja pero ¿Sabéis la cantidad de matrimonios rotos por el fin de semana en Ikea, las sillas “Sentarsën” y las arandelas Enrrøsken? Un sinvivir. Y en Leroy Merlín comprando grifos, y la caseta para el perro… Estos señores se comían al perros, sin caseta ni nada. ¿Grifos? Al río y santas pascuas plín.  Eso sí el agua caliente lo tenían un poco complicado, pero no eran mucho de bañarse… por si se les van las vitaminas o algo.


Vete al Continente y tráeme tres “mamuses”

Díselo ahora a tu marido. Que si quiero ver el fútbol, que mejor pedimos un chino… Antes sí que eran hombres de verdad… o a lo mejor todavía no eran hombres, pero no pedían chinos para comer. Puede que sí se los comieran, pero a lo que voy… Que tú le decías (como quiera que se comunicaran) a tu pareja y se iba al Continente y te traía tres mamuses. Y es que los continentes estaban cerca (como vimos en la imagen anterior), se podía ir andando de un sitio a otro (todavía no se habían inventado las autopistas radiales). Y  no sólo mamuses, también dinosaurios, tigres, leones, todos quieren ser los campeones. 


Me traes tres lanzas, un hacha y leña para hacer el desayuno

Me das un contramuslo de Velociraptor, y te doy un litro de sangre de murciélago que queda ideal para pintar en las paredes de la cueva. O te lo cambio por un abrigo de piel de “Leopoldo” albino, que el blanco se lleva mucho ahora. Así es como se conseguían las cosas. La versión de yo te doy cremita, tú me das cremita.


Dieta neandertal.

Comían cereales para desayunar, eso sí. Pero ni Frosties ni Friskis de Kellogs ni nada. A lo vivo. Cogían un trigo, de un trigal, espantaban a los tristes tigres, y se comían las espigas. Luego ya de comida unas alitas de águila real, y unas chuletas de bisonte. Todo orgánico. La merienda se la saltaban porque todavía no había chocolate. Ni siquiera bollicaos. Y para cenar algo ligero… una gacela y dos piezas de fruta, que podía ser un melón o una sandía.


Hoy no voy al gimnasio

Otra cosa buena es que no pagaban el gimnasio y luego no iban. Estos ni pagaban ni iban. Que ya corrían detrás de los bichos y hacían ejercicio sin necesidad de spinning o aquaplanning o sporting (ni de Gijón ni de ningún sitio).


Ni drojas ni tabaco ni alcohol

No iban al gimnasio, pero eran personas muy sanas. El alcohol ni lo probaban, ni para curar las heridas siquiera. No había tabaco… Colón todavía no había ido a América a por él. Drojas seguro que ya existían como no había colegios, ni señores a la puerta para dártelas en los caramelos, o en el Cola-Cao, pues la gente no se enganchaba. Puede que le dieran algún bocadito a la marihuana, que estaba muy rica en ensalada.


¿Había colegio?

Eran todos gratis. Privados, pero gratis. Lo de leer, escribir, las cuatro reglas no era muy útil en aquella época. Aún no habían salido los libros de Harry Potter y pocas cuentas había que hacer. No tenían los ejercicios de un tren sale de Barcelona… o una bala de cañón recorre una parábola. Los niños aprendían otras cosas.  Tenían asignaturas como “Encendimiento de fuego en condiciones extremas, sin mechero ni cerillas”, “Cocinar sin sal es posible”, “Como distinguir un hacha de una lanza” y “Cazar tu primer bisonte a los 6 años es fácil si sabes cómo”, “Colorear la cueva sin salirte de ella”


Conversaciones sin fronteras

Dicen que no eran mucho de dar discursos ni de grandes conversaciones. No eran de dar la turra. Por no tener, no tenían ni políticos, una de las ventajas más “ventajosas”. Muy concisos eran a la hora de comunicarse. Chicha, pan (bueno pan no había, ni Bimbo siquiera) y al lío. Que lo del lío, ya sabéis. Tampoco eran de camelarse a la pareja ni nada. Ni excusas. Que te duele la cabeza. Pues para eso tenemos las aspirinas… ¿Veis como todo cobra sentido?

Al final todo vuelve al comienzo. Las aspirinas eran para perpetuar la especie. Y decían que no estaban evolucionados… Igual tampoco hemos evolucionado tanto los hombres… Las mujeres sí, pero esa es otra historia.




¿Qué pasó con Fulanito y Menganito?

$
0
0
Antes de comenzar a leer tengo que avisar. No quiero que os llevéis ningún desengaño. No conozco ni a Fulanito ni a Menganito. Ni sé que ha pasado con ellos. Es una manera de hablar. No. De Zutanito tampoco os puedo contar nada. Mirad a ver si está en Facebook o algo.


El caso es que se ha puesto de moda lo recordar a gente que era famosa y a la que hemos perdido la pista. ¿Os acordáis de los actores de la serie tal? ¿Qué fue de…? de Pues el niño ya ha crecido y se ha convertido en… Espera, espera. ¿Qué noticia hay en que un niño haya crecido y ahora sea un abogado? La noticia sería que no hubiera crecido, o que ahora fuera una iguana, o un semáforo, pero que un niño después de 40 años, ahora sea una persona con más edad…


¿Y qué pasa con los que no eran famosos y nadie se acuerda de ellos? ¿O de esas cosas y modas que todo el mundo ha olvidado. Yo voy a lanzar una lanza… o romperla, o lo que se haga con  las lanzas. El caso es que me gustaría acordarme de…

El señor del Videoclub

Me refiero a todos esos señores que vivían dentro de los “videocluses”. Entre la sección de comedias y novedades. Algunos salían directamente del terror, pero esa es otra historia. Ese señor, o señora, que también las habría, a la que le preguntabas sobre esa peli en la que salía ése que sale en otra película y con toda su paciencia intentaba ayudar. O si ya había llegado la última novedad (ya sé que las novedades siempre están a la última, pero en aquella época todavía no lo sabíamos). El caso es que le hemos perdido… Y yo que le quería devolver aquella película que no me dio tiempo a rebobinar…   


Tom y Jerry

Muy bien no debieron terminar, ya os lo aseguro. No se llevaban muy bien entre ellos. Algún que otro golpe ya se dieron. ¿Por cierto quién era Tom y quién Jerry? ¿Veis que injusticia? Son como Andy y Lucas que nadie los distingue… A ver, dejadme que me explique, se les distingue, uno es un gato y el otro un ratón. Ahora hablamos otra vez de Tom y Jerry. Andy y Lucas no se han convertido… o igual ahora son musulmanes o judíos y también se han convertido… ¿Y qué me decís de Pixie y Dixie? Seguro que ahora están trabajando en cualquier laboratorio pulsando palancas, o en un laberinto buscando queso o droga, o algo. Y el gato Jinx, ¿Seguirá teniendo acento andaluz o se le va y viene como a Antonio Banderas? ¡No somos nadie!


Las cintas del pelo

Si eres hombre, no eres tenista profesional y aún llevas una cinta en el pelo, mira a ver si aún vives en los 80, y la gente lleva camisetas muy ajustadas, pantalones de campana, hombreras y bigotes. Aun se ve alguno en el gimnasio con cinta en el pelo, muñequeras, pantalones cojoneros (a la altura testicular) y calcetines por encima de la rodilla, y diciendo “Ya ves truz. Voy a mover el body y a hacer un poco de footing, porque es guay del Paraguay”.  Después de eso, le podéis matar. Lentamente, muy lentamente. Despacito.

 

El Bic naranja

Con lo fino que parecía. Al final triunfan las cosas normales. Porque bic naranja escribía fino, pero el que sigue ahí, al pie del cañón, es el bic cristal, el que escribe normal. Bic naranja contra bic cristal, dos escrituras a elegir. Fíjate que el cristal parecía menos fiable, como más quebradizo… Aunque dentro de poco nos olvidaremos también de los bolígrafos y todo el mundo a teclear como locos.


Las gaviotas de Duncan Dhu

No es que las tuvieran en su casa ahí revoloteando, que eso explicaría muchas cosas. Se preguntaban dónde estaban. Y nos dieron la brasa durante años y venga a cantar que podrás beber y lamentar y que ya no volverán sus alas a volar, y cien gaviotas dónde irán. Pero luego la gente se fue olvidando y nunca nadie más se acordó. Y de las gaviotas tampoco. Si queréis ver el vídeo de la canción, lo buscáis en Youtube, que yo paso… Podréis desprender de mis comentarios que no soy muy fan del grupo… y acertaréis.


Los cantautores

Hubo un tiempo en el que había un montón de señores que no cantaban muy bien, pero que cantaban mucho, todo el tiempo y siempre canciones en las que protestaban. Algunos incluso parece que se habían tragado una cabra, como el de Papa, cuéntame otra vez. La cosa se ha normalizado y estos señores ya no salen en la radio, ni en la televisión… Ahora es mucho peor, lo de normalizarse no quiere decir que haya mejorado. Ahora sólo sale gente perreando. Hemos pasado del cabreo, al perreo. Y esto no va a acabar bien.


La Chica de la gasolina

Hablando de perreo. ¿Os acordáis de la chica de la gasolina? Esa a la que le gustaba la gasolina, y le daban más gasolina, y así durante 3 minutos de canción. Que era mucho mejor lo de los cantautores y hasta Duncan Dhu y las jodías gaviotas. Pues resulta que dejó de gustarle la gasolina y con la crisis empezó a probar el diésel. Parece que ha madurado y ahora ya está con las energías alternativas.


Gooooool de Señor

Pues sí amiguitos. Hubo un señor que metió un gol. Metió varios, pero uno muy importante, contra Malta. Los más jóvenes o los que no estéis muy familiarizados con la historia de España, es una de las cosas más importantes que nos ha pasado. Lo de Don Pelayo, los Reyes Católicos y luego ya va el gol de Señor. Que sí, que Iniesta también ha marcado uno muy importante, pero no es lo mismo. ¿Ande andará Señor?


Naranjito, Cobi y Curro

Así juntos parecen los nombres de tus amigos del barrio. El chino, el negro, el cuatro ojos, naranjito, Cobi y Curro… Pero fueron muy importantes en su época. Naranjito en el 82 y los otros 2, estrellas de 1992. Ningún coche sin su pegatina de Cobi. Pero la fama es así, como viene, se va, como Internet. Un día estás en la cima y al siguiente nada. Ya casi nadie se acuerda de ellos, sólo algunos cuantos locos con camisetas guays como para reírse de ellos. ¡Qué ingratos somos con nuestros personajes históricos!


Las cabinas de teléfono

¿A que últimamente no habéis visto a Supermán por la calle? Normal. ¿Dónde se va a cambiar ahora? Pues tiene que ir salvando vidas en traje, con lo incómodo que es y no puede ponerse su capa, la malla y los gayumbos por encima. Que otra cosa que os iba yo a preguntar. Alguien tendría que recoger aquellos trajes, aunque fuera para venderlo luego en tiendas de segunda mano. ¿O volvía Supermán a por la ropa? Y si tenía superpoderes, ¿Para qué mierda necesita la cabina? Yo veo detalles ahí que no cuadran. El caso es que cada vez tiene menos sitios para cambiarse el superhéroe y al final si se vuelve alcohólico tendremos que culpar a Movistar o algo.


Los 7 enanitos

El Príncipe Encantado se casó con Blancanieves. Nunca supe si se había casado encantado o ya estaba encantado antes de conocerla. El caso es que todo el mundo habla de la parejita. Pero ¿Y los enanitos? Nadie más se acordó de ellos. Como son bajitos, no tienen sentimientos. Ahí seguirán trabajando en la mina. Que puede que fueran contentos, pero ya podía haber hecho algo Blancanieves. Darles un trabajo más digno para que no tuvieran que picar nunca más. Pagarle un logopeda al mudito, o llevar al médico al mocoso… ¡Algo que hiciera algo! Para que veáis… Comiendo perdices y los pobres enanitos trabajando y sin jubilación ni nada.


San José

Lo que han hecho con este hombre sí que no tiene perdón. Que sí, que le dieron un día, El Día de San José. ¿Pero que sea el día del Padre? ¿No veis ahí algo de coña con el hombre? Nadie más supo que fue de él. ¿Qué pasó con la carpintería, o ebanistería, o como se llamara el negocio de San José? Que siempre le dejaron de lado. Pintó muy poco este hombre. Haría muchos muebles, pero pintar, poco.


Seguro que se me olvida alguien… De otros, como dice Cervantes, no quiero acordarme, y casi mejor así.

Los Museos, cosas y casos que pasan ahí dentro

$
0
0

Toda ciudad que se precie tiene al menos un museo. Hay ciudades que se precian más y tienen muchos. Y hay ciudades que son despreciables, pero esa es otra historia.

Hoy os voy a hablar de los museos. De las cosas, casos, gente, y todo lo que te puedes encontrar dentro. Bueno, todo, todo, no, que hay muchos museos, y de casi todo y tampoco es plan de abrumaros. 


Y empezamos por el nombre. Cada museo se llama de una manera, pero en general, la palabra viene del latín MUS (lugar) y EO (en que se exponen cosas para que la gente las vea).

Tipos de museos

Hay de todo tipo, cienes y cienes, o miles de cienes. Modernos, en los que no saben si lo que hay es una obra de arte o alguien se ha dejado olvidado las cosas. Lo importante es leer los cartelitos para saber qué está expuesto, y qué no. Que hay gente que se queda mirando a los extintores  o las papeleras del museo creyendo que es una alegoría a la libertad y al progreso.


Luego hay otros museos en los que las cosas están sin terminar. Vasijas que se han caído y que no las han pegado. Estatuas a las que les faltan brazos, o cuadros en los que se les han caído cubos de pintura encima y los has colgado sin darse cuenta.



Hay otro tipo de museos que podríamos meter en la categoría de Lo tenemos todo, oiga. Son aquellos en los que tienen todo mezclado. Un cuadro por aquí, una estatua, las botas de fútbol del delantero del pueblo, una carta del alcalde a su primera novia (a la suya, no a la del delantero)… Todo, en el mismo sitio, sin ningún conocimiento.


¿Cuánto cuestan?

Pues hay museos carísimos y otros gratis. Estamos hablando de entrar. No creo yo que estéis pensando en compraros el museo entero, con todas sus cosas… Por ejemplo el Museo Británico que es gratis pero que te saldría por un pico si lo fueras a comprar… Aunque aquí hay cosas que no costaron demasiado. Se las iban llevando poco a poco de los diferentes países. Como hace la gente con las toallas del hotel, pero los ingleses lo hacían con las iglesias, o las momias, o las estatuas… aunque les faltaran brazos o tuvieran que desmontar un templo entero.



Precios

Ya puede haber ofertas para grupos, para niños, mayores de 65 años. Que me imagino a los de Mocedades yendo a un museo con sus nietos y al final les tienen que dar dinero y todo. Cumplen todos los requisitos para que les salga la entrada muy económica. Pero tú, tienes que pagar casi siempre. No eres menor, ni mayor, ni militar sin graduación (qué viejuno suena esto), ni has nacido en el pueblo del museo, que esa es otra. En Madrid, da igual que seas hijo, nieto de madrileños, que te toca pagar. En otros lugares, si eres autóctono, pasas gratis. En otros, sin embargo, pagas como si te fueras a llevar todo lo que tienen expositado… ¿o se dice exponido?



Ya estoy dentro, y ahora qué

Da igual que sigas las indicaciones, que hayas leído con anterioridad sobre el museo y lo que hay que ver, que siempre verás el mismo cuadro cincuenta veces. Y te perderás el que has ido a ver. ¿Fuiste al Museo de Arte para los Modernos y no viste la famosa escultura de los Hipsters sin Barba? Seguro que no eres el único. Yo soy de los que va al Prado a ver a Velázquez, y seguro que ese día, libra… O quiero ver El Guernica y se lo han llevado a otro museo o lo han robado, o algún gracioso lo ha coloreado, que al señor Picasso se le olvidó.


Si IKEA hiciera Museos

No estoy proponiendo que cada uno monte sus propias obras… aunque estén sin terminar. A lo que voy es que deberían organizarlo igual. Con su recorrido ya hecho, sus flechas, saber por dónde vas pasando… Pintura del XVII, escultura etrusca, mosaicos romanos. Todo bien explicadito y siguiendo un orden. Y al final, la tienda, aunque no haya “almondigas” ni platos de salmón. Eso sí, el que se salga del recorrido que se atenga a las consecuencias, que le puede pasar como a un señor que entró al Museo Británico buscando la sala de Egipto y apareció en una iglesia de Palencia (en la misma Palencia, en misa de 12, la que ponían en la 2, con altos índices de audiencia).


¿Gótico, románico, barroco, pop o heavy metal con fusión de flamenco?

Da igual que vayas a una pinacoteca (que no sabes si vas a ver pinos o te tienes que poner a bailar) o a una tienda de discos, que al final casi todos los movimientos artísticos se llaman casi igual. Lo que está claro es que la pintura de antes era diferente. No había tanto gotelé como hora. Eso sí, la gente eran todos muy iguales, en el siglo XVI y XVII todo el mundo se parecía a Putin. En el Renacimiento todos estaban como dopados, mucho culturista había en la época. Daba igual que fueras Papa, Cristo, David, Goliat, Moisés, cuadrados. No me quiero imaginar cómo pintaría Miguel Ángel a Swcharze… Szharce… a Cristiano Ronaldo.



La gente de los museos

No hay un arquetipo de asistente al museo. Hay de todo, como en botica, pero en los museos… Seguro que hay un museo de la botica, o boticas en los museos. Ya me estoy liando.

Los guías

Son esos señores y señoras que se ponen delante de un cuadro, pero no para no dejarte ver, que también hay de esos, sino para contártelo todo. Te explican quién lo pintó, cómo, cuándo, por qué, quién lo pagó, si el marco venía incluido ya… Todo. Y la gente les atiende con mucha atención (¡Chúpate esa Cervantes! ¡Vaya frase que me he “cascao”! Atender con atención. A veces, llevan un paraguas, por si llueve dentro, que nunca se sabe.


Adolescentes y tiernos infantes

Si no hay grupos de jovenzuelos correteando, es que ni es museo ni nada. Gritando, todos, y a la vez. Que tú quieres escuchar al guía y sólo oyes las bromas de los chavales y las risitas cuando ven a una señora sin ropa en un cuadro, o una escultura que ha pasado por las manos de Ramón Ramírez.


Los enamoraos

Siempre hay unos enamorados dentro del museo. Visitándolo. Seguramente también haya alguna pintura de dos enamorados, o una escultura, pero se diferencian de ellos, porque estos van andando. De la mano, siempre. Y se miran mucho, más que a las obras de arte. Qué bonito es el amor… más que el museo.



El que lee hasta el letrero de los lavabos

¿No habéis ido nunca con alguien así a un museo? Se lo lee todo. Y te lo cuenta. Que tú también lo has leído, pero da igual. Mira, mira, esta estatua es románica, y apostólica y su autor es Giovanni Piero que Te Pongas la Mantilla Blanca, Piero que te pongas la mantilla azul… y así hasta el infinito y más allá.


El que está hasta los huevos

Siempre suele ser un señor, de ahí lo de los huevos. Ya no quiere ver más obras, se ha cansado. Quiere salir del museo, y dejarse de flamencos, románicos, románticos, góticos. También hay señoras y señores que se sientan dónde pueden, y les da igual que sea una silla, un banco, o una estatua del siglo palito, palito, palito (III) AC o DC (o cualquier otro grupo de heavy metal)



Vamos saliendo, por la tienda de “susvenís”

Si al final va a ser como Ikea. Al final ya has visto todo, y ahora te toca pagar. Pues aquí pagas al principio y al final. En la tienda hay imanes de cocina de las obras más famosas, corbatas, puzles, pañuelos, réplicas, contrarréplicas, láminas, extintores con el nombre del museo… ¿O eso no está en venta?



Bueno, pues ya hemos visto el museo, la gente que hay dentro. Hemos leído todos los cartelitos y sabemos quién ha pintado la Gioconda de Leonardo (que la pintó Picasso). También hemos comprado el imán de la nevera con la imagen del Guernica de Da Vinci, sin colorear ni nada y hemos dudado si aquél vigilante que se había quedado frito, era parte de la exposición, o estaba falto de sueño.



Nos vemos en el museo… Me reconocerás porque soy el que está leyendo los cartelitos junto a las obras de arte.





Las colas de los demás son mucho mejores

$
0
0
Eso es así. Son más rápidas y funciona mejor. La tuya no va como debería. Ojalá fuera como esa otra. Pero no, es lo que hay, me ha tocado ésta.

Aunque pudieras cambiarla, casi sería peor. Tú querrías una cola más corta, pero en el momento en que decides cambiar, la cosa se alarga. Y no hay manera de evitarlo. Pero mejor lo explico con imágenes. 

Aquí va la cola


Así funciona en todo el mundo. No es que todos estén en contra tuya, es que la vida es así. Las colas del señor son inescrutables. Lo que quiera que signifique la palabra inescrutable, que parece ser que se refiere a algo que no puede ser escrutado, que tampoco sé lo que significa.

El caso es que esto pasa muchas veces. Vamos a recopilar algunos casos.

El carril de la carretera

Hay 20 carriles y en el tuyo se junta el señor que no va a más de 45 kilómetros por hora en la autopista. Es el del Mercedes, que va tan despacio para que el resto de los mortales pueda admirar el coche sin perderse ni un detalle. Se junta también que es el carril en el que se ha averiado ese Seat 127 del año 75. ¿Es que están rodando la tercera temporada de Cuéntame? Y se cruza una Vespino, y en cuanto te cambias de carril, pasan todos los ciclistas de La Vuelta a España, el Tour, el Giro y dos carreras populares de runners veteranos.


El ascensor

Un suponiendo. Vas a un edificio, cualquiera, que tiene entre 1 y 200 ascensores. El número da igual. Tú esperas al que no llega. Y si por casualidad llegara, deja de funcionar. Es como la lotería, pero aquí sabes que te va a tocar. La lotería tampoco toca, pero el ascensor que no asciende es el tuyo. Si por el contrario, lo que estás esperando es un descensor, la cosa cambia. Bueno, no, tampoco cambia. No desciende. Menos mal que siempre tienes la opción de ir por las escaleras… Aunque con la suerte que tienes, seguro que has elegido un edificio bajito… El Empire State Building… que mira que hay buildings y te ha tocado uno de los más altos. Aunque hay veces que las escaleras son muy rápidas.


Escaleras mecánicas

El día que más peso lleves, será cuando las escaleras mecánicas decidan dejar de funcionar. Te han visto llegar con tu maleta (que podría ser tu maleta de piel y tu biquini de rayas) y han dicho, hasta aquí hemos llegado. Y no hay nada peor que subir andando por unas escaleras mecánicas, parece que van a empezar a moverse en cualquier momento. ¿Verdad?

Por cierto, que si no sabes qué es lo de la maleta de piel y el bikini (¿O es biquini?) de rayas, en este vídeo saldrás de dudas.


Ahora que has visto el vídeo es muy probable que ahora tengas más dudas. ¿El cantante estaba borracho? ¿El realizador y el cámara se habían drogado? ¿Cómo es posible que alguien baile así? ¿Por qué en vez de un piano, el músico está tocando un mueble? ¿Qué instrumento suena como si estuvieran tensando una goma? ¿Por qué sonríe todo el tiempo el cantaor? Tanta pena no tendrá si Eva María se fue. Y por último, ¿Qué cojones es una indulgencia?

La taquilla del cine

Ahora ya se pueden comprar las entradas por Internet a través de tu teléfono, del ordenador, por correo electrónico o giro postal (que siempre me imagino a Bisbal bailando al lado de una oficina de correo). A lo que vamos. Tú sigues comprando las entradas en el mismo cine. Que te gusta hablar con el taquillero. Y además ahora al mismo tiempo que compras la entrada para ver una película con título en inglés que no sabes pronunciar, puedes adquirir palomitas, agua, chuches, un perrito, un gatito, Ignacios (Nachos les llaman, que hay confianza), un apartamento de Torrevieja y cualquier cosa que se te ocurra.


El caso es que tú eliges una taquilla, y siempre, siempre, por los siglos, amén, es la más lenta. Da igual que delante tengas una persona, o toda la familia Ruiz Mateos (que no hay quien distinga a unos de otros), que la tuya será más lenta.


Embarcamiento

O como quiera que se llame el proceso de subirte al avión. Ahí estás, el primero. En el caso de que estés en la puerta correcta (que a veces las cambian nada más que por joder), la señorita, o el señorito dice que va a comenzar el proceso de embarque. Empezarán por aquellos pasajeros cuyos asientos estén comprendidos entre la fila 16 a la 38. Lo adivinas ¿no? La tuya es la 15, y tienes que dejar pasar a medio avión. A los pasajeros con menores, a los menores pasajeros, a los mayores, a los altos, a los bajos, a los que tienen la tarjeta Premium, la tarjeta del Corte Inglés y dos tarjetas amarillas.


¿Esta es mi cola?

Os aconsejo que siempre os aseguréis de que es vuestra cola. No vaya a ser que sea la cola de otro. Me explico. Si ves una fila muy corta es muy probable que no sea la correcta. La tuya será la más larga. Y que sea larga no siempre es bueno.


Entonces, ¿La mía cuál es?

Llevas media hora en una cola, ya sea para entrar, para comprar los tickets, para recoger algo, para comprar el pan… Para lo que sea. Si estás en la cola de empujar, tú tienes que ir a la de tirar. Si es para entrar, estás en la de salir y así sustantivamente.



Odia a todo aquel que…

Personajes que están en todas las colas, o también llamados coladeros. Son esos que se te ponen al lado, como el que no quiere la cosa y al poco tiempo están delante de ti. Otros, son los “Yo sólo venía a preguntar” y no sólo preguntan, sino que además les contestan, y ya de paso se cuelan.


¿Verdad que no te importa?

Y claro que te importa, pero cómo le vas a decir a una tierna ancianita que se está colando. Te mira con esos ojitos, detrás de las gafas de ver de cerca, de lejos, y periferia, y no les puedes decir que no. Realmente sí se lo puedes decir. Pero ya se te ha colado. Mira que contenta se pone


Venimos juntos

Te va a tocar ya. Estás a puntito. Pero el de delante te tiene preparada una sorpresa. Es como San Luis, y viene con los cien mil hijos, y los sobrinos, y dos colegios de Murcia. En total 200 millones de personas que se te cuelan… Por cosas menos importantes han comenzado guerras.

Quizá estéis esperando algún consejo para evitar que te pasen estas cosas. ¡Lo siento! Esto es así, no hay manera de evitarlo, es inevitable. Como casi todas las cosas que no se pueden evitar. Paciencia y atento a la cola.



En estas fechas tan señaladas, me gustaría tomarme unos días de descanso. Son sólo dos semanitas sin blog. ¿Puedo? ¿Vale? ¡Por favor!

¡¡Gracias!! 

El sueño de un futbolero

$
0
0
Seguro que me perdonáis que haya estado un tiempo sin publicar y estoy convencido que no os importará que hoy os cuente una historia personal. Ya veréis como entendéis que estuviera unas semanas calladito.



Los que me conocéis, y los que no, también, porque soy un poco pesado, sabéis que me encanta el fútbol. Tengo la mala suerte de habiendo nacido en Madrid, una ciudad en la que hay 11 copas de Europa, mi equipo no tenga ninguna. ¡Qué mal repartido está el mundo! Y eso que hemos estado cerquita… 3 veces.


Esto de ser de un equipo o de otro es una decisión personal. No quiero, ni puedo, echarle la culpa a nadie de ser del Atleti. No es como ser alto o bajo, o haber nacido en una ciudad u otra. Esto se puede cambiar.  Conozco a muchos que nacieron atléticos y se han pasado al lado claro (como Darth Vader, pero al revés) y a otros que nacieron de otro equipo, y se han hecho del Atlético de Madrid. Yo he decidido que no me cambio, que me quedo con lo que tengo.  Y no es ni mejor ni peor, es lo que hay. Incluso hay gente a la que no le gusta el fútbol. Hay gente “pa tó”.

Mi padre, otro futbolero, me llevaba siempre a ver partidos de fútbol cuando era pequeño.  Cuando era pequeño yo. Que cuando él era pequeño, yo no le conocía, pero sí me han contado que le gustaba jugar y ver partidos. Con mi hermana, íbamos los tres a ver fútbol a los campos de tierra del barrio, partidos de juveniles y también al Vicente Calderón y alguna que otra vez al Santiago Bernabeu.  Como dice el himno del Centenario del Atleti de Sabina, “con mi papá de la mano”. La canción habla del Metropolitano, pero tan mayor no soy, aunque todo se andará.


Mi primer recuerdo en el Vicente Calderón fue una final de una copa que ya ni siquiera existe. La Intercontinental en 1975 (así soy de mayor, y algo más, porque me acuerdo del partido). En una época en la que todo era en blanco y negro, allí todo era rojo y blanco. Banderas, bufandas y yo flipando viendo a señores con melena jugando, bastante mal, comparado con los futbolistas de ahora. Por allí andaban Gárate, Ayala, Adelardo, Irureta... Luego llegaron nuevos jugadores, los que salen en la canción del himno y otros mejores, alguno que otro peor, pero no vamos a poner a señalar a nadie, que señalar está muy feo.

Pasaron los años y allí seguíamos yendo al fútbol. Siempre con la sensación de la primera vez, con la ilusión del niño que vio el primer partido hace tanto tiempo y soñando con que alguna vez ganaríamos algún título importante.  Y alguno ganamos, aunque nos quedaba pendiente uno.


Estos últimos años, no he podido ir tanto, pero mi hermana sí que ha ido al fútbol con mi padre del brazo. Hasta mi madre, que nunca le gustó y sus conocimientos futbolísticos se pueden resumir en: “pues a mí Casillas me parece un chico muy majo”, ha ido al Estadio con él.  En los últimos meses cada vez se le hacía más cuesta arriba. El último partido se lo pasó regañando a Torres porque mientras calentaba no le dejaba ver las jugadas. Habíamos conseguido que le cambiaran la localidad y le pusieron a ras de césped. Y además, perdimos contra el Barça.


Ya tenemos sitio para ir al Wanda Metropolitano. Hemos elegido unos asientos, mi hermana, mi padre y yo, en un lugar en el que no hay que subir casi escaleras. Una de sus últimas sonrisas, y mi padre siempre ha sonreído y reído mucho, fue viendo el partido con el Leicester y escuchar que los del Atleti animaban más que los ingleses. Pasamos a semifinales y ahora otra vez a intentar ganar esa copa que se nos resiste. Lo digo como si yo pudiera marcar algún gol…

Cuando empezó la enfermedad de mi padre le dije que había que luchar y  ponerse fuerte para ver ganar al Atleti la Champions. Y ha luchado mucho, junto a mi madre, para seguir sonriendo y disfrutando de lo que más le gustaba, estar con su familia y ver al Atleti… a veces no por el mismo orden.

Estas semanas hemos pasado mucho tiempo en el hospital. Mi padre ya estaba muy débil. Llegó el momento del sorteo y mi padre no hacía más que mirar el reloj. A la 1 menos cuarto, me preguntó con un hilo de voz. “¿El sorteo?” Miré mi móvil para ver cuáles eran los emparejamimentos de la Champions League. “Papá, nos ha tocado el Madrid”, le dije. Nos miró a mi madre, mi hermana y a mí, se acurrucó y se quedó dormido. 

No vas a saber si esta vez sí que es la buena. Tampoco vas a poder sentarte en el nuevo Metropolitano. Pero estoy seguro de que te quedan muchas sonrisas y que nosotros, te seguiremos llevando de la mano para ver los partidos de tu equipo.

¡Gracias papá! Yo sí que sé por qué soy del Atleti.





Vivan las madres que nos parieron

$
0
0
Ahora diréis que escribo sobre las madres para compensar que el otro día escribí sobre mi padre. Y eso sí que no, aunque tengo que reconocer que  estoy un poco gominolas últimamente (dícese del que se encuentra un poco blando, diríase de algodón, más tierno que el día de la madre).


Escribo porque hemos sido siempre muy injustos con ellas. Ahora todo el mundo a comprar regalitos por el día de la madre. Que si un circuito de spa (que no es más que meterse en una piscina con chorritos de agua y unos masajitos. Y yo creía que era algo así como el circuito del Jarama para que se diera una vuelta en coche) o una taza con cualquier chorrada escrita, un marco de fotos, o una corbata (aquí, a lo mejor, me estoy liando).


Y es que es necesario reivindicar el papel de la madre, con todo lo que han hecho por ti. Vamos allá.

Noches en vela

Este término igual hay que ir adaptándolo a los tiempos modernos. El caso es que entre la guerra que damos los hijos cuando somos pequeños, luego en la adolescencia y lo que viene siendo toda nuestra vida, ellas no hacen más que de sufrir y de sufrir, y sin dormir. Cuando no están esperando a que llegues por la noche, se tienen que levantar a ver si te has hecho pis, o si hay que darle de comer… Otros no tienen remedio…


Amor de madre

Que una madre te quiere siempre. Incluso aunque te salga un hijo como el marido de Alaska. Que su madre le querrá… Si su madre no le quiere, se entendería. Y te perdona todo. Menos que le pises lo fregao, que eso es imperdonable.


Evitando “costipaos” desde tiempos inmemoriales

La mejor receta para evitar las enfermedades la tienen las madres. “Abrígate hijo no pases frío y come bien que te estás quedando muy delgado y no quiero que te pongas malo”. Así todo junto. Luego ya viene la versión “ponte la Rebequita que luego refresca”, o “no vayas a cuerpo gentil” (nunca supe que era un cuerpo gentil), o “¿no vas un poco fresco?”, todo para que te pongas algo encima. Lo que tienen que sufrir las madres de los actores porno.


Ese (o esa) no te conviene

Y siempre tenían razón. Para tu madre no hay nadie conveniente. Hay madres que no te lo dicen, pero lo piensan. Las madres son como Chenoa. Me explico, la canción de Chenoa, que no todas las madres son como ella... La mía es mucho más guapa. Quiero decir que cuando tú vas, ellas han ido y vuelto y  tú todavía estás aquí… Mejor que te lo explique la cantante que seguro que yo me lío con tanta ida y venida.


¡Te vas a caer! Y aciertan…

No sólo aciertan con si alguien es conveniente o inconveniente. También en lo de que te vas a caer. Tarde o temprano te caes. Que el ratio de acierto es pequeño, también es verdad, pero mira los videntes. No dan ni una y ahí les tienes. Las madres te dan el pronóstico gratis, y encima, a veces, cobras por caerte y no hacer caso.


Asesora musical

Toda madre tiene en su interior un asesor musical. El padre también, pero hoy le toca el turno a las mamás. Y es que toda música que te guste a ti suele ser del género ratonero (que será la música que le gusta a Mickey Mouse), chunda chunda (aquí hay diferentes variantes, pero es la música repetitiva), guachi guachi (la que viene siendo en otros idiomas) o las del género idiota. Básicamente es que no le gusta casi nada de lo que escuchas. Luego, al cabo de los años, te das cuenta de que a ti tampoco te gusta aquella música. ¡Qué razón tenía mi madre!


Experta en moda

Cuando te preguntan: “¿Vas a salir así?” es decirte de forma simplificada lo que viene a ser: “Hijo, no me gusta el outfit que te has puesto hoy. Yo me hubiera decantado por otro pantalón con el que no parecieras un pordiosero. En vez de esa camiseta que tiene más años que la madre de Jordi Hurtado, te hubieras puesto una camisa como dios manda”. Lo que Dios manda puede parecer un concepto muy amplio, pero se reduce básicamente a lo que les gusta a ellas. Y normalmente aciertan… También está la versión femenina de “¿No crees que vas un poco corta?”. Eso se lo dice mucho la reina a su hija mayor, pero creo que no tiene que ver con la ropa.


Superpoderes

Las madres tienen superpoderes, con sólo acercarse a ti saben si tienes fiebre, si has fumado, la marca de tabaco, el número de cervezas que te has apretado y los números de la lotería primitiva. Bueno, lo último no, pero casi. Y con sólo verte llegar a casa. A lo mejor he exagerado un poco y no saben exactamente  la temperaturas, pero todo lo demás, lo clavan.  Alguna madre han contratado ya para los aeropuertos y detectar gente que fuma cigarritos de la risa y otras clases de estupefact… estupend… “drogaína”.


Qué bien comes. Podrías ir al gimnasio

El mismo día, a la misma hora te pueden decir estas dos frases. Te dicen que comas como si te fueran a vender al peso y al poco tiempo te dicen que igual deberías empezar a comer verdurita. ¿En qué quedamos? La dieta no se lleva bien con un cocido, acompañado con dos chuletones, dos barras de pan, y de postre una tarta de chocolate con café, chocolate, churros… Pero es que todo está tan rico que cualquiera dice que no.


Y después de esto, sigue comprando tazas con lo de la mejor mamá del mundo, o suscripciones a “coser es fácil, si sabes coser” y esas mierdas. Lo que tienes que hacer es hacerle caso, ponerte ropa como dios manda, comer bien, ir al gimnasio para que te vea guapo, llevar una rebequita, no tomar drogaina, y no pisarle lo fregao. ¡Ah! Y ser formal, lo que quiera que signifique eso.


Certificado sea tu nombre, venga a nosotros…

$
0
0
Por motivos ajenos a mi voluntad me he visto en la obligación de meterme en papeleos. Nadie en su sano juicio quiere hacer estas cosas. Mira los funcionarios. ¿Por qué te crees que van a tomar café? Para no hacer gestiones.


Ahora es cuando los funcionarios me han dejado de leer. Lo retiro. De verdad que me encanta hacer gestiones con vosotros. ¿A quién quiero engañar? Pero la culpa no es sólo de los funcionarios. Os explico por qué no me gustan los gestionamientos papeleros de toda índole.

Formularios

Yo soy el que pone los dos apellidos en el campo donde se pone el nombre. O el primer apellido en la dirección del domicilio. El mismo que llena de tachones el formulario online.

Me tienen que avisar 10 veces de que hay un error en el campo nombre del padre, del hijo y del espíritu santo. Si el formulario es en papel, lo leo, releo, y cuando ya estoy seguro de todo, lo pongo mal. No, no me consuela no ser el único. Tengo gran parte de culpa de la deforestación del Amazonas. Me he cargado árboles suficientes para repoblar la extensión de Canadá… o para hablar en campos de fútbol, el Bernabéu, el Calderón y El Nou Camp todos juntos… Quizá Canadá no es tan grande, pero os hacéis la idea.


¡¡¡No me cabe!!!

Ya no es únicamente que pongamos el nombre donde se ponen los apellidos, es que incluso poniendo las cosas bien, no caben en su sitio. Me siento como el negro de Whatassap, pero en versión nombre y apellido. Todo muy largo. Me explico, si tienes dos nombres y apellidos como las personas normales, no esos extranjeros que se llaman John Smith y les encuentran a la primera (¿Cómo lo harán si todos se llaman igual?), ¿Por dónde iba? Ah, sí, el nombre. Que no cabe en ningún formulario. Y eso que no soy rico y tengo 4 nombres y 20 apellidos compuestos. Me imagino a la familia real rellenando formularios. Por eso tienen tantos problemas con la justicia… o igual no es por eso.


Ese no, el otro, no ese tampoco

Mira que les ponen nombre a las cosas. El resguardo de la póliza del volante del certificado de la disposición…. Vamos a ver, ¡Que es un jodío papel! Pues no, le llaman timbre (y antes se compraban en el estanco, no valía una ferretería o una tienda de bicis…). Y con sello, fotocopias compulsadas (que eran copias, pero con estudios… ) y con registro notarial, y con firma por duplicado y sellado con sangre de murciélago asiático… ¡La Virgen! Perdón, mejor no meter a la iglesia en esto también.


Ventanillas, colas…

Seguimos hablando de papeles, no nos hemos pasado a los aviones. El caso es que si hay dos filas, la probabilidad de que estés en la equivocada es inversamente proporcional… siempre me hice un lío con las matemáticas. El caso es que estás en la equivocada, casi seguro. Y preguntas, y el de adelante tampoco sabe… y el de más adelante tampoco y comenzáis a hablar y se crea un vínculo de amistad entre gente que no sabe si está en el sitio correcto. Incluso gente que termina casándose entre ellas. Y es que el mundo de las colas y el matrimonio ha estado siempre muy unido… Creo que me vuelvo a liar entre unas cosas y otras.


Si lo puedes hacer por el “internez”

“Muchas cosas se pueden hacer por Internez”, te dicen. “No necesitas ir a ningún lugar ya”, comentan. ¡Mis cojones 33! (nunca entendí el porqué del 33, un número impar, y sin mucho sentido en el mundo cojonero…) El caso es que no todo se puede hacer online. Al final te faltará algo, el certificado 33 (que debe estar relacionado con algo que le salga de los huevos a la administración), o un sello, o una firma, o la hostia en verso. Al final me va a castigar dios. ¡Perdón!


Por teléfono es más fácil

Les falta decir que por teléfono es más fácil que no te hagan caso. ¿Sabéis esas veces que no para de sonar un teléfono en una oficina? Pues el que llama soy yo y no me lo coge nadie. ¿O esas veces que te están atendiendo y paran todo para contestar una llamada? Pues ese no soy yo. Soy el que está en la ventanilla equivocada y me dejan con la palabra en la boca para ayudar a uno que le dijeron que por teléfono todo es más fácil. 



¡Sonríe!

Sí amiguitos. También hace falta que pongan tu careto facial en algunos documentos. No sirve con decir que el nombre que pone ahí es el tuyo. ¡Que tú eres tú! Tienen que verte. Y eso que la foto muchas veces se parece muy poco a ti. En realidad no se parece a ningún ser vivo viviente. Ni muriente. No te dejan poner morritos como en tu Instagram. O fotos de tus pies (alabado sea el santísimo, que hay cada uno con unos “pieses”)… Y la foto tiene que tener unas ciertas medidas, y un fondo determinado, no vale en la que estoy tan cuqui de cuerpo entero.


Plazos, días hábiles

¿Sabíais que había días hábiles? Yo soy el que escojo los días menos hábiles, los más torpes de todos. Cuando la oficina está cerrada o se ha pasado el plazo, o la luna creciente tiene ascendiente con Orion (como el hijo de Pujol, que vaya nombre les pone a sus hijos. Sólo tiene tino para conseguir pasta). O me falta el papel adecuado o dice que no soy persona física ¿PERDÓN? Que no soy persona física dice. Ni química… Y es que ya esto de tanto papeleo me afecta mucho. A veces le doy demasiadas vueltas a la cabeza.



Ya os habéis hecho una idea de lo que os decía de los jodíos papeles. Podrían hacer las cosas más fáciles…. Os voy a ir dejando que me tengo que ir a arreglar y ordenar algunos papeles.  ¡Nos vemos!




Todos llevamos un Mr. Bean dentro

$
0
0
No me digas que nunca te has sentido un poco, o mucho, como Mr. Bean. Que quieres hacer algo y al final te tienes que reír de lo mal que te está saliendo. Tú pones todo el empeño en que las cosas salgan bien, y la lías más. Como cuando dejan a nuestro presidente con un micrófono.


Y es que en el fondo todos somos sentimientos y tenemos seres humanos… Hay gente que ni tiene seres humanos ni sentimientos, ni sentido del humor, ni momentos Mr. Bean.  Me explico. Pero tenéis que estar atentos y no distraeros con el teléfono…


Los momentos Mr. Bean pueden pasar en cualquier sitio o en cualquier momento, pero vamos a clasificarlos por el lugar en el que ocurren. Ya te aviso que los hechos que se relatan y cualquier relación con personas reales es simple coincidencia… o no


 Baño

Igual no es el mejor sitio para comenzar (según lo que vayas a comenzar), pero es uno de los lugares en el que se concentran más momentos Mr. Bean por metro cuadrado. Realmente cuanto más pequeño sea el baño, mejor (para explicar la teoría del Mr. Bean) y si ya no es tu baño habitual, peor (o mejor) todavía. Faltará papel, o agua, jabón, toallas, o el pestillo de la puerta, o todo a la vez y ahí entrarás en conflicto con el derecho a la privacidad y con todas las normas del decoro y las buenas costumbres… De ahí viene la expresión pasar una vergüenza que te cagas.


La ducha

Sí, suele estar en el baño, pero es un mundo aparte. Que se lo digan a la chica de Psicosis si no es un sitio peligroso. Dónde si no, puedes experimentar cambios de temperatura que pueden ir de los 100 grados centrífugos a congelarte en 10 segundos. O que se te caiga el jabón (procura no agacharte en según qué sitios), o sufrir de ceguera transitoria por la introducción de champú (y no, no hay ninguno que no pique. Son todos unos traicioneros). Por eso hay gente que no entra nunca en la ducha. 



En la cocina

No me refiero a los programas en los que sale gente concursando para ver quién hace mejor el polígono regular de fécula en zumo de aceituna aderezado con cloruro sódico del Mar Muerto… también conocido como patata frita. Aunque no os lo creáis es un lugar muy peligroso. Lo tiene todo para que haya accidentes. No puede pasar nada bueno en un sitio en el que hay fuego, cuchillos, hornos… yo trato de entrar poco. Nada más que a la nevera, que hace más fresquito.


En la cama

Que hay accidentes en la cama no es nada nuevo, aunque no podemos culparla a ella exclusivamente. Y es que la cama no se usa como es debido. Hay gente que en vez de dormir, que es para lo que está hecha, se pone a experimentar, y a algunos les da por leer, o echarse un cigarrito, y a otras cosas peores que no voy a decir por si hay niños pequeños. Si veis a alguien como la chica de la imagen, no hagáis caso a lo que dice. No quiere que vayáis a dormir. Os quiere engañar, y al final no vas a dormir.


En la casa… de otros

Cada casa tiene vida propia. Unas no quieren que los extraños toquen las cisternas, o las calderas, o las ventanas y puertas. No funcionan sino es con alguien conocido. Todas tienen su truco. Y no aceptan que les meta mano nadie. Algo normal por otra parte. Yo tampoco me dejo tocar por desconocidos… las desconocidas sin embargo… Tampoco me tocan. El caso es que en casas ajenas estás siempre en riesgo de accidentes inesperados.


En transportes públicos

Si hace mucho que no vas en transporte público es muy probable que tengas momentos Mr. Bean. No sabrás cómo comprar un billete, el precio, por dónde se mete, por ahí no es, por aquí tampoco, dale la vuelta (seguimos hablando del billete y del transporte público). ¿Se paga antes, después, durante? Y claro, si estás en un país que hablen tu idioma, todavía, pero y si no hablas el idioma. Y hay sitios que el metro o el autobús cuestan como si te lo pudieras llevar a casa. Aún no sé cómo subirme a algunos transportes públicos. Pero no soy el único. 



En el extranjero

No vayáis nunca. Es un sitio peligroso. En algunos lugares a la gente no se la entiende (Murcia es un caso extremo). Y tienen costumbres distintas, los de Murcia también. Tú vas tan pichi a intentar cenar a una hora normal, pongamos las 10 de la noche, y no está abierto más que la gasolinera y algunos sitios donde hay camas y la gente no duerme. Bueno, los hospitales también están abiertos, pero eso es otra historia. Y es que los extranjeros son muy dados a hacer la vida imposible a la gente normal.


El coche

Un coche es un microcosmos especial en el que puede pasar de todo. Es el sitio en el que te das cuenta de que necesitas limpiarte la nariz (los semáforos y los mocos han estado unidos desde tiempos inmemoriales). También es donde cantas tus canciones favoritas… esas que no puedes cantar en lugares públicos porque le daría vergüenza hasta a Mr. Bean, incluso hasta a tu lover J


La calle

Ya lo dicen en las películas, que la calle es muy peligrosa, que hay que tener cuidado ahí fuera. Hay calles que están llenas de gente y ya sabemos cómo es la gente. Cruzar de acera no es fácil (lo dejo aquí para no meterme en jardines y hablar de otras aceras). Y hay gente que te da droja por la calle (que no sé yo en que calle está eso). También hay coches, y gente que está más pendiente de su nariz que de conducir… y ya si estás en una calle en el extranjero, no te cuento.


Ya habéis pillado lo que os quiero decir con los momentos Mr. Bean, ¿no? Y ahora ya cada uno que tome precauciones. Yo, ya me voy a ir despidiendo que habrá que ir a dormir.





Viewing all 417 articles
Browse latest View live